Peloteros mexicanos que defendieron la franela de los Yankees recuerdan cómo fue vivir la experiencia con los 'Bombarderos del Bronx'
Van 20 mexicanos que juegan en los New York Yankees, una de las franquicias deportivas más famosas y valiosas del mundo. Además, la organización neoyorquina es la que más títulos de Serie Mundial tiene con 27, por lo que su éxito es total dentro y fuera del diamante.
Jugar con los ‘Bombarderos del Bronx’ es un privilegio y muy pocos lo pueden presumir. Para la campaña 2024, Alex Verdugo, Víctor González y José Treviño podrán presumirlo y así llegar a 20 peloteros con raíces mexicanas en usar las famosas ‘pinstripes’ (rayas) de los neoyorquinos.
Portar esta camisola no es poca cosa. Implica mucho peso y responsabilidad dentro y fuera del terreno, pues los ojos del mundo se ponen sobre ti. Ante eso, Karim García, Luis ‘Cochito’ Cruz y Ramiro Peña, que fueron de los mexicanos que se ganaron su lugar con los ‘Mulos de Manhattan’, contaron a ESPN lo que significó entrar al Yankee Stadium como parte de la organización.
La impresión de estar en el Clubhouse del Yankee Stadium
Karim García
“Mira, yo tuve la oportunidad de estar sentado en el clubhouse a un lado de Roger Clemens y Jason Giambi. Entonces era con los dos que más platicaba, uno como bateador, y bateador de fuerza igual que un servidor, pues trataba de ver qué es lo que él buscaba en ciertos pitchers o en ciertas situaciones, que era lo que más platicaba con él. Y con Roger, ver de qué manera atacaba la zona con bateadores de poder dependiendo de la situación del juego. Otra de las personas que también me acogió llegando ahí al equipo de Yankees fue Derek Jeter, pues era el capitán”.
“Había ido anteriormente como jugador en contra de ellos, pero cuando ya te metes al dugout o al vestidor de casa, pues es completamente diferente la historia, porque a veces las fotos de Babe Ruth, de Lou Gerhig, inclusive de Yogi Berra y muchos otros, Reggie Jackson, Joe DiMaggio, grandes jugadores que estuvieron con ellos. Y lo mismo que estar sentado donde ellos estuvieron sentados también, el poder platicar con tus compañeros, el solamente pensar que uno está donde esos grandes caballos inmortales del beisbol estuvieron ahí es algo muy bonito”.
Ahora entiende la magnitud de lo que fue estar en los Yankees
Luis ‘Cochito’ Cruz
“Es muy bonito porque si uno de esos equipos te llama es porque estás haciendo las cosas bien y algo ven en ti que puedes aportar al equipo. Contento que el poquito tiempo en Yankees me dieron un trato tremendo. Me tocaron caballos de toda la vida y agradecido con Dios por el don que me dio de jugar beisbol”.
“Cuando juego con Dodgers en 2013 que me sacan del roster de 40 y me agarra Yankees, en ese momento no sabía la magnitud de que un mexicano esté con Yankees porque estaba dolido de salir de Dodgers. No me di cuenta de la magnitud tan grande de estar con Yankees hasta que lo veo de afuera”.
El orgullo de representar a una organización a nivel mundial
Ramiro Peña
“Pues la verdad es un orgullo el representar una organización reconocida a nivel mundial. Yo creo que en todos lados del mundo puedes ver una gorra de Yankees. Fue una experiencia muy bonita. El representar esa ciudad, esa organización, es algo, la verdad, muy bonito. Yo creo que es la de las organizaciones más reconocidas y muy contento de eso y es un orgullo haberlo hecho”.
“Cuando yo empecé, veía el uniforme y veía el logo de Yankees, y yo, ‘wow’. ¿Dónde ando? O sea, fue algo muy bonito por lo que representa a la organización y la tradición que tiene. Después me tocó jugar en el viejo (estadio), en el futuro me tocó jugar en el viejo, y también ver un estadio con tanta historia, toda la gente que ha pasado por ahí, que ha pisado ese terreno, estoy agradecido con Dios de esa de esa oportunidad de haber pisado también ahí”.
“Yo volteaba al Clubhouse, y veía a toda esa gente, y yo, ¿Qué ando haciendo aquí? Yo así de que, increíble ver a todos esos compañeros, porque son compañeros, gente que tú admiras, y vas admirando. Decir de que son mis compañeros fue una experiencia, la verdad, inolvidable, y lo disfruté, todo. Sí fue muy bonito”.