Los Mets planean designar al relevista Jorge López para asignación luego de que fuera expulsado y arrojara su guante a las gradas en la octava entrada.
NUEVA YORK - Los Mets celebraron una reunión de equipo sólo para jugadores el miércoles por la noche después de ser barridos por los Dodgers con una derrota de 10-3 que incluyó otra implosión del bullpen en las últimas entradas y el relevista Jorge López arrojando su guante a las gradas después de ser expulsado.
El marcador estaba empatado a 3 al llegar a la octava entrada antes de que los Dodgers anotaran seis veces ante tres relevistas. Uno fue López, quien permitió un jonrón de dos carreras a Shohei Ohtani y luego se quedó atrás 3-1 ante Freddie Freeman antes de discrepar con la decisión del árbitro de tercera base Ramón De Jesús sobre un swing de control. La discusión le valió a López una expulsión.
López se quitó la camiseta y arrojó su guante por encima de la red hacia la multitud mientras salía del campo. No mostró ningún remordimiento tras el partido.
"No, no me arrepiento", dijo López.
López continuó: "Pasó lo que pasó. Estaré aquí mañana si me quieren. Lo que quieran hacer. Voy a seguir haciendo esto, ya sabes. Estoy sano... estoy Estoy listo para regresar mañana si quieren que esté aquí. Así que estaré aquí".
López calificó la disputa entre él y De Jesús como un "malentendido".
"Simplemente algo surgido de las emociones", dijo López, "simplemente me importa un c... nada".
Después del juego, los Mets comenzaron el proceso de designar a López para asignación, según The Associated Press. Tendrán siete días para canjearlo, liberarlo o enviarlo directamente a las menores.
El mánager de los Mets, Carlos Mendoza, dijo que aún no había hablado con López sobre su comportamiento cuando se reunió con los periodistas.
"Siempre que pasas por un momento como este, quieres ver algunas emociones de los jugadores, de cualquiera aquí", dijo Mendoza. "Pero lo que vimos hoy en López no es aceptable. Y lo abordaremos internamente aquí".
El campocorto Francisco Lindor convocó a una reunión exclusiva de jugadores mientras Mendoza se dirigía a los medios en un intento de animar al equipo a cambiar de rumbo.
Los Mets, ahora con marca de 22-33, están a 16 juegos del primer lugar en la Liga Nacional Este y a seis juegos del último comodín. Han perdido siete de ocho juegos y 13 de 16. Varias de las derrotas, incluidas dos de las tres contra los Dodgers esta semana, incluyeron colapsos del bullpen al final.
Lindor dijo que la reunión, que duró más de 30 minutos, fue una oportunidad para que los jugadores hablaran y se responsabilizaran unos a otros. También se produjo después de que el equipo colocara al taponero Edwin Díaz en la lista de lesionados por un pinzamiento en el hombro el miércoles temprano y luego perdiera al toletero Pete Alonso por una lesión en la mano luego de que fuera golpeado por un lanzamiento contra Los Ángeles.
"Fue bueno para todos", dijo Lindor. "Muchos jugadores hablaron. Eso es realmente bueno. Se lanzaron muchas opiniones. Ahora sólo tenemos que unirlos".
A los Mets les quedan 107 juegos de temporada regular, pero la realidad es que el equipo tiene dos meses para convencer al presidente de operaciones de béisbol, David Stearns, de que no cambie jugadores antes de la fecha límite del 30 de julio. Stearns dijo el martes que la fecha límite será "un punto de inflexión en la temporada".