Hace un año, Agustín Canapino se embarcaba en una empresa altamente compleja y desafiante en su carrera deportiva: se sumaba a IndyCar. El reto era supino: nunca había corrido en autos de fórmula y jamás había disputado carreras en óvalos. A un lado dejaba el automovilismo argentino, un lugar en el que se sentía altamente cómodo, en el que era candidato a campeón en cuanta categoría corriera, en el que cortaba tickets en lo autódromos con su sola presencia y en el que los sponsors se aglutinaban a su alrededor para insertarse en un mundo desconocido, de la mano de Ricardo Juncos. El piloto arrecifeño arriesgó todo, hasta su integridad física, porque el umbral de riesgo al que estaba acostumbrado en las competencias de turismo de la Argentina está lejos del que comenzó a experimentar al viajar a 380 km/h en circuitos ovales. Pero lo hizo y muy bien para su primer año. Cerró el torneo en Laguna Seca ganándole claramente a su entonces compañero Callum Ilott, exintegrante del programa Ferrari, finalizó la temporada dentro del grupo de los 22 que integraron el Leader’s Circle, puesto que le permitió sumar el millón de dólares de premio que otorga la categoría y que fue fundamental para que Canapino pudiera asegurarse una segunda temporada junto al equipo de Juncos.
El 10 de marzo, Canapino comenzará su segundo año en IndyCar cuando la categoría inicie su ejercicio 2024 en las calles de San Petersburgo, esta vez con Romain Grosjean como compañero dentro de la escudería de Juncos. En la previa, y en medio de sus vacaciones, el argentino charló con ESPN.com sobre los momentos que vivió en 2023 y cómo está para este nuevo año en la divisional de Estados Unidos.
-¿Ya te acostumbrase a ser piloto de IndyCar?
-Por momentos me quedo pensando: ¡qué locura! Que locura estar normalizando esto, estar corriendo de IndyCar y que voy a hacer una segunda temporada, que voy a compartir equipo con Grosjean… Todas cosas que hasta no hace mucho para mí eran totalmente utópicas, imposibles de imaginar algún día. Así que por momentos no, por momentos me cuesta creer que es verdad. Pero por otro lado me empiezo a acostumbrar y empecé a normalizar esto que no deja de ser una locura total, porque no te vayas mucho tiempo para atrás y esto era para mí totalmente impensado.
-El año pasado habrás pensado que llegabas diez puntos al arranque del torneo, pero ahora que vas para tu segundo año, ¿cómo estás comparado con 2023?
-No, sinceramente, al contrario. Ya lo he dicho varias veces, la pasé mal, de verdad, lo sufrí mucho. Yo sabía que no estaba ni cerca de estar diez puntos, estaba muy, muy lejos de ese valor. Y no iba a saber realmente que tan lejos estaba hasta que no lo viviera en carne propia. Y hoy, después de un año, me doy cuenta que estaba mucho peor de lo que yo me imaginaba y todavía sigo estando lejos de estar diez puntos. Por un montón de motivos, desde que va a ser apenas mi segundo año en un monoposto, no en IndyCar, en un monoposto, y encima es IndyCar. O sea, se juntan las dos cosas: mi inexperiencia con este tipo de autos y que es el más exigente de todos, porque el IndyCar es el más exigente del mundo a nivel de demanda física para un piloto. Entonces se me juntan esas dos cosas, pero sí estoy mucho mejor si me miro a esta altura del año pasado. A esta altura de febrero de 2023 lo mío eran dudas, era incertidumbre, miedo, me preguntaba qué estaba haciendo mal, el idioma… Todas negativas y todas dudas. Ahora es lo contrario. Es entusiasmo, son ganas. Hace un rato estaba repasando datos y videos del año pasado en San Petersburgo porque inclusive en las vacaciones no paro, siempre trato de continuar con mi evolución y con mi trabajo de análisis, porque me gusta y aparte porque considero que me ayuda. Sé que será apenas mi segundo año, que no logré nada y que va a ser muy difícil. Pero estoy con la confianza de que terminé andando muy bien en 2023 y peleando la carrera en Laguna Seca, superando claramente a mi compañero de equipo. Tuve un año con resultados que, para mí, fueron fabulosos, porque salir tres veces 12º en IndyCar son resultados magníficos por mi inexperiencia, porque estoy en un equipo nuevo, en evolución y porque además tuve parciales muy buenos, como el de Laguna Seca o el de Iowa o el de las 500 millas, que peleamos a ritmo de punta contra grandes estructuras y grandes pilotos. Sabemos que fue el primer año, que tenemos mucho por mejorar y que tenemos todo dado para mejorar. Ahora tengo dos ingenieros full time, uno con experiencia y otro con muchas ganas y capacidad. Tenemos gente en Juncos permanentemente, no part-time como teníamos, el equipo con un año más de experiencia, los mecánicos terminaron haciendo paradas de boxes muy buenas, yo con un año de experiencia… Es decir, todos los ítems y todos los puntos de este proyecto hacen que sea imposible que no sea un mejor año. Es una cuestión lógica y matemática que este año sí o sí va a ser mejor. No sabemos hasta dónde. Obviamente siempre tenemos que mantener los pies sobre la tierra, pero por una cuestión natural y lógica nos espera un año mejor, seguro.
-A ese hay que agregarle que ya tenés el bagaje de conocer las pistas y el auto.
-Ese es otro ítem más que agregás muy bien al combo este de cosas que hace imposible que no nos vaya mejor. Que nos vaya mejor no significa que vayamos a ganar una carrera ni pelear el campeonato, porque eso es un salto abismal y no hay que olvidarse que somos un equipo chico y en evolución. Y yo también soy un piloto nuevo y en evolución. La llegada de Romain al equipo es un punto a favor enorme por toda su capacidad y experiencia. Y también está que nos fue bien siendo nuevos. Indudablemente la base es esa y nos ilusionamos con poder estar más cerca del top ten, de los equipos grandes y ser más competitivos de lo que fuimos el año pasado.
-Dentro de ese combo que marca que este año tiene que ser mejor que el pasado, ¿cuál es el objetivo que vos te marcás?
-Como base, entrar al Leader’s Circle, porque ese premio del millón dólares es fundamental. Y no es fácil entrar. Hay pilotos y equipos como el de Foyt, el Meyer Shank y un auto de Andretti que no entraron. Mirá los equipos que estamos nombrando contra un Juncos que recién lleva un año con dos pilotos. O sea, es muy meritorio realmente lo que ha hecho Ricardo. Encima conmigo, que era un rookie total. Por lo tanto, parece fácil, pero la entrada al Leader’s Circle no es fácil y esa es la base para nosotros como equipo en crecimiento. Pero sí me gustaría poder lograr algunos top ten. Estuve cerca en 2023, y por momentos estuve muy cerca de lograr mucho más que un top ten, pero no se me dio. Así que, como base me gustaría eso, poder entrar al Leader’s Circle ver se puede lograr algún top ten y después bueno, quién sabe. La realidad es que hubo carreras que estábamos para mucho más y no lo pudimos concretar, pero es algo que se tiene que dar en un fin de semana como fue Laguna Seca, que veníamos peleando por un podio o el de Iowa, que teníamos ritmo de podio o el de las 500 millas, que estaba para entrar al top ten en ese final que terminó con el accidente. Es posible ilusionarse porque ya estuvimos cerca del año pasado, por qué no repetir esta temporada.