MADRID -- El Real Madrid encara un nuevo duelo crucial esta temporada en la eliminatoria que le enfrenta al Chelsea. Los partidos contra los Blues no marcarán el destino de Ancelotti, pero las formas y la imagen pueden ser clave para que el italiano no tenga problemas a final de año.
Y es que el Madrid no llega tan bien como muchos pensaban a los cuartos de final de la Champions League. Tampoco llega mal, ojo, pero la ausencia de rotaciones por parte del técnico italiano ha dejado entrever que los Casemiro, Toni Kroos o Luka Modric no aguantan como cuando tenían 5 años menos.
De esos tres nombres hay dos casos que preocupan mucho. Por un lado, Casemiro. La falta de un recambio para el brasileño se ha notado en los últimos dos años. Primero Zidane y, de nuevo, Ancelotti, creyeron que el Madrid necesitaba un segundo hombre en esa posición para dar oxígeno al ex jugador de Sao Paulo. Sin embargo, entre que la directiva no tuvo opción que Ancelotti no le da oportunidades a Antonio Blanco si quiera en partidos más “fáciles”, el brasileño lleva muchos minutos acumulados y está firmando una de sus peores temporadas como blanco.
El otro nombre es el de Toni Kroos. En su posición sí que hay un recambio porque, ya sea Eduardo Camavinga o Federico Valverde, hay opciones. Ancelotti ha preferido apostar siempre por el alemán porque entiende que Camavinga está en formación y las lesiones de Valverde no han ayudado durante el año. Y Kroos, como Casemiro, llegan en un momento donde su plenitud física está lejos.
Tampoco llega en su “prime” Vinícius Júnior. Sin embargo, en el caso del brasileño, la preocupación no es tanta ya que sus ganas y su hambre de títulos están por encima de cualquier cosa. Además, con la sombra de Kylian Mbappé acechando de cara a la próxima temporada, el joven extremo sabe que cuando tiene a su lado a Karim Benzema su rendimiento se dispara. Además, con el recuerdo de la noche contra el Paris Saint-Germain en el Santiago Bernabéu, el ánimo de los blancos estará por encima de su físico.
ESPN ya contó anteriormente que la intención tanto de Ancelotti como la Del Real Madrid es la de respetar el contrato que une a ambas partes. Veremos qué ocurre contra el Chelsea, pero mucho se tiene que torcer la cosa como para que el italiano no termine esta temporada. A partir de la finalización de la misma, las partes se sentarán para evaluar el futuro, pero Ancelotti sabe que la imagen en Europa es importante para que no se le vuelva a cuestionar. Y más en un año en el que el técnico sigue sin contar con un jugador diferencial con el que sí cuentan otros grandes equipos europeos.
En Vigo sufrió, pero los de siempre ahí estuvieron. Mientras este Madrid tenga a Benzema, a Thibaut Courtois y a Eder Militao y David Alaba, da la sensación que al Chelsea, que tampoco llega en un gran momento, se le puede eliminar de la UCL. El año pasado, en semifinales, los ingleses pasaron por encima del Madrid. Veremos si en esta ocasión el físico está por encima de la calidad y del corazón blancos.