Los entrenadores mejor pagados del mundo se enfrentan cuando Manchester City y Atlético de Madrid arranquen la disputa por un puesto en las semifinales de la Champions League
Pep Guardiola y Diego Simeone son dos de los grandes entrenadores que ha producido el fútbol moderno en décadas. No en vano, son los mejor pagados del mundo. Este martes en el Etihad Stadium, comienza la eliminatoria para definir quién avanza a las semifinales de la Champions League.
Pero mucho antes de que Manchester City y Atlético de Madrid quedaran emparejados en el sorteo, Pep y Diego protagonizaron un duelo épico en la Champions League 2015/16. La plantilla española sorprendió al mundo al ser aplastada por el Bayern en dos partidos, pero asegurando un puesto en la final por la cantidad de goles fuera de casa.
En aquella ocasión, el Atletico abrió la eliminatoria con victoria en el Vicente Calderón por marcador de 1-0 con gol de Saúl Níguez a los 11 minutos del primer tiempo. La jugada fue advertida exhaustivamente por Guardiola a los jugadores del Bayern de Múnich en la conferencia, pero no hasta el punto de evitar el ataque del rival.
Tras encajar el gol, el equipo de Múnich empezó a jugar más pero no pudo ante una inspirada actuación de Oblak, que al día de hoy sigue en la portería del Atlético de Madrid. David Alaba, ahora defensa del Real Madrid, incluso remató al poste, en la jugada más peligrosa de los alemanes en el partido.
El segundo encuentro sería en el Allianz Arena, de Múnich, y Guardiola pidió una preparación diferente. El entrenador lo hizo, como cuenta el periodista Martí Perarnau en el libro "Pep Guardiola: La Evolución".
"El domingo por la tarde, después de comer con David Trueba y otros amigos, Pep se encerró en casa y cumplió su deseo de repasar por completo el primer partido: buscaba una pequeña grieta en el muro construido por el Atlético o el camino a seguir en el Allianz Arena. (...) Sobre las ocho de la noche, Pep pensó que había encontrado el punto débil", cuenta el biógrafo.
El punto débil sería el espacio entre el defensa Giménez y el lateral Filipe Luís, normalmente cubierto por el centrocampista español Koke. A juicio de Guardiola, el Bayern crearía superioridad numérica y abriría un hueco en la defensa de Simeone si fuera capaz de sacar a Koke de su posición e infiltrar a Thomas Müller.
El plan fue revisado el lunes y puesto en práctica en el campo de entrenamiento del Bayern. En el partido el Bayern se mostró muy superior, abrió el marcador con una falta de Xabi Alonso y pudo hacer el 2-0 con Müller, pero el alemán falló un penal atajado por Oblak.
La eliminatoria seguía abierta hasta que, en la segunda mitad, un contraataque al estilo de los equipos de Diego Simeone silenció a la grada en Múnich. Griezmann aprovechó los errores de Alaba, se enfrentó a Neuer y venció al portero para empatar el partido.
Aún así el Bayern haría el 2-1, con un cabezazo certero de Lewandowski casi abajo el travesaño, pero no llegaron más goles. Neuer también le dio una inyección de ánimo al equipo al detener un penalti cobrado por Fernando Torres, pero el puesto en la Gran Final fue para el Atlético.
La derrota dejó marcas en el equipo del Bayern. Como informa Perarnau, los jugadores no parecían creer en la eliminación. Xabi Alonso estaba en estado de shock y lloraba mucho, mientras que Alaba parecía perdido y estupefacto. Müller, culpándose a sí mismo por el penal fallado, guardó silencio.
Los números solo se sumaron a la tristeza. En dos partidos, el Bayern remató 53 veces ante la portería de Oblak para llegar a marcar solo dos tantos en 180 minutos. Según la estadística de 'Goles Esperados', es decir, goles esperados en función del número y la calidad de las ocasiones creadas, los alemanes ganarían el partido de Múnich con creces: 4,24 goles esperados frente a 1,4 del rival.
"Eso fue como el Barça contra el Chelsea en 2012, pero aún más brutal", lamentó un desconsolado Guardiola a la salida del estadio junto a dos de sus ayudantes. Domènec Torrent salió del Allianz Arena a las tres de la mañana en busca de respuestas imposibles de encontrar.
Seis años después, los entrenadores vuelven a enfrentarse en la Champions. Los de Guardiola abrirán la eliminatoria en casa, mientras que los de Simeone tendrán la ventaja de decidir en el Metropolitano. El que avance se enfrentará al ganador del Real Madrid vs Chelsea.