El uruguayo Federico Valverde, centrocampista del Real Madrid, ha dejado grandes actuaciones en esta edición de la UEFA Champions League, donde jugará su primera final y en la que participó de diez partidos, siendo titular en siete de ellos.
El camino del “Halcón” hacia la final comenzó en setiembre de 2021, jugando los 90 minutos en la victoria como visitantes 1-0 sobre el Inter de Milán. Allí acompañó a Luka Modric y Casemiro en el mediocampo, mientras que Toni Kroos no estaba disponible por lesión. El gol del triunfo llegó tras un exquisito pase del uruguayo para Eduardo Camavinga, que cedió para la definición de Rodrygo Goes.
El capítulo dos no fue tan feliz, ya que el Merengue perdió 2 a 1 como local en una recordada derrota contra el Sheriff Tiraspol de Moldavia. Valverde también completó los 90 minutos.
El tercer juego del Real Madrid fue contra Shakhtar Donetsk en Kiev, y fue una aplastante victoria por 5 a 0 donde el ex Peñarol ingresó en la segunda mitad y jugó 12 minutos.
Valverde luego se perdió los siguientes dos partidos de la fase de grupos debido a una lesión. No pudo estar en las victorias 2-1 sobre Shakhtar en Madrid, ni en el 3-0 ante Sheriff en condición de visitantes. El 7 de diciembre, el volante volvió a tener presencia en Champions al disputar 12 minutos en el triunfo 2-0 sobre Inter en el Santiago Bernabéu.
Real Madrid clasificó primero en su grupo, el D, con 15 puntos, y el Inter fue segundo con 10 unidades. En octavos de final, el sorteo quiso que le tocara uno de los rivales más duros posibles: el PSG de Lionel Messi, Kylian Mbappé y Neymar.
En la ida, que fue victoria de los franceses por 1 a 0 en París, Valverde solo pudo jugar ocho minutos, ingresando desde el banco. Las perspectivas para el equipo blanco no eran muy positivas, tras haber sido superado fuertemente en cuanto a lo mostrado en el primer encuentro. La situación fue todavía peor porque PSG comenzó el juego de vuelta poniéndose arriba en el marcador. Sin embargo, el empuje de Valverde y sus compañeros dio sus frutos y lograron revertir la serie para quedarse con el global por 3 a 2 a favor, luego de un genial triplete de Karim Benzema. La actuación del uruguayo fue destacada por su despliegue y su capacidad para aportar a la defensa cuando el equipo lo necesitó.
Desde ese entonces, quizás por una confianza renovada ante el improbable triunfo, Valverde comenzó a mostrarse con otra seguridad y fue titular en los siguientes tres partidos. El próximo rival tampoco era nada fácil: el último campeón, Chelsea. Pero desde el encuentro de ida, Real Madrid marcó la cancha con un 3-1 favorable como visitante en Stamford Bridge, con el uruguayo como puntero derecho. El “Halcón” tuvo un despliegue exuberante, aportando desborde y precisión en ataque, y la cobertura necesaria en la faceta defensiva.
El juego de vuelta vio al Real Madrid pasar un muy mal momento, cuando Chelsea se puso 3 a 0 arriba, dando vuelta la serie con 15 minutos por disputarse. A pesar de ello, el Madrid sacó a lucir su historia y logró igualar la llave antes del final, y quedarse con la victoria en la prórroga. Valverde terminó absolutamente extenuado, jugando los 120 minutos y siendo clave en el cierre del encuentro con varios cortes providenciales ante un equipo inglés que buscaba la igualdad a la desesperada.
En las semifinales, Real Madrid chocó contra Manchester City y la ida le regaló a los espectadores uno de los mejores partidos de los últimos años en la Champions League. Fue 4-3 para los de Pep Guardiola en Manchester, con Valverde presente los 90 minutos. El uruguayo volvió a jugar en el mediocampo, y tuvo que ayudar más en lo defensivo que lo que venía haciéndolo. De todas formas, dejó una maravillosa jugada para el archivo, cuando apretado contra la banda, salió con un lujo de taco por los caños del lateral Olexsandr Zinchenko.
A pesar del alto listón dejado en la primera manga, el partido de vuelta tampoco decepcionó. Valverde arrancó como titular como extremo derecho, y Manchester City comenzó ganando con gol de Riyad Mahrez. Sin embargo, con dos goles tras los 90 minutos de Rodrygo Goes, Real Madrid igualó la serie y forzó el tiempo extra, donde un penal de Benzema le dio una clasificación absolutamente de locos. El uruguayo jugó los 120 minutos con una enésima demostración de su poderío físico y la solidaridad de su juego siempre en función del colectivo. Cubrió huecos, le cerró los caminos a su rival y fue una opción para la salida limpia de su equipo desde cada área de la cancha.
Ahora, Valverde tendrá por delante el desafío más grande de su carrera en el Real Madrid. La chance de jugar su primera final de Champions League será una enorme motivación para el uruguayo, que podría convertirse en el primer futbolista del país en levantar el título desde que Luis Suárez lo hizo con el Barcelona en 2015.