BARCELONA -- Leo Messi más allá del terreno de juego. Cristiano Ronaldo fuera de las cámaras. Dos jugadores, dos personajes por si mismos, que ocupan desde hace más de una década la atención mediática de todo el mundo, cuyos movimientos son escrutados hasta el mínimo detalle y cuyo carácter altruista no es, por menos conocido, para nada inexistente.
Existe alrededor del crack argentino un silencio sepulcral en cuanto a su faceta solidaria con los más desfavorecidos de la que se sabe muy poco. Messi atiende una cantidad tal de solicitudes que acaba gestionandose a través de su fundación, la Fundación Lionel Messi, que en los últimos años ha dedicado cantidades millonarias en tantos otros proyectos.
Su implicación en el proyecto SJD Pediatric Cancer Center, un centro de tratamiento para el cáncer infantil en Barcelona, fue tan destacada que en menos de dos años se consiguieron recaudar más de 27 millones de euros de los 30 necesarios para llevar adelante el proyecto, sumándose a la llamada de Messi diversas instituciones y empresas privadas.
Los detalles de sus obras benéficas se conocen en cuentagotas pero sí se sabe que se desarrollan desde hace años, repitiéndose en su país y con la pandemia del coronavirus como una de las últimas razones para contemplar su perfil más solidario, cuando el Hospital Clínico de Barcelona le agradeció públicamente el 24 de marzo una donación que diversas informaciones cifraron en un millón de euros.
Embajador de buena voluntad de UNICEF, con cuya organización colabora desde 2004, no han sido pocas las campañas en que ha tomado parte Messi en beneficio de los niños más desfavorecidos, comprometiéndose con actividades caritativas de toda índole, tal y como hace también con la ONG Médicos sin Fronteras, que se ha beneficiado no pocas veces de sus donaciones, siempre alejadas del escenario excepto cuando se conoció que en 2017 la justicia condenó al diario español La Razón a indemnizarle con 72 mil 783 euros por haberle acusado de dopaje y Leo donó la integridad de dicha indemnización a la ONG.
De Cristiano Ronaldo suele criticarse su carácter egocentrico y su gusto público por el lujo, ya sea con una colección de automóviles de gran cilindrada o por apariencias excéntricas... Que ocultan otra faceta menos conocida del portugués, entregado también a obras de solidaridad de las que no se tienen tantas noticias.
La pandemia del coronavirus también hizo reaccionar a Cristiano Ronaldo, quien entregó cuatro millones de dólares para equipar cuatro unidades de cuidados intensivos en diversos hospitales de Portugal, según desveló el diario Record y confirmó el presidente de uno de los centros hospitalarios.
Donante de sangre y plasma desde 2008, ha cedido su imagen a campañas de donación de sangre tal como es embajador global de la ONG Save the Children, usando su voz y visibilidad global para sensibilizar sobre los problemas a los que se enfrentan los niños más vulnerables de todo el mundo.
De la misma manera colabora con la Fundación Make a Wish, dedicada a cumplir deseos de niños enfermos a la vez que apoya a bancos de alimentos en su país, donde su personalidad solidaria goza de gran apoyo popular.