El entrenador del Deportes Tolima, Hernán Torres, estuvo como invitado en NEXO Colombia en donde habló de sus primeros años como portero y de la reputación que se ha ganado como entrenador por ser, supuestamente, malgeniado.
El estratega sostuvo que desde que era futbolista se habituó a hablarle duro a sus compañeros para que escucharan sus mensajes y captaran sus concejos con la intención de mejorar la estructura del equipo y lograr de esa manera superar a sus rivales.
“Yo siempre hablo duro, como si estuviera regañando, pero es algo que me acostumbre a hacer desde que era portero. Yo hablaba, ordenaba y gritaba, siempre tratando de avisarles a mis compañeros”, dijo.
Torres agregó que vivir los partidos tan intensamente fue algo que aprendió cuando atajaba en el Deportes Tolima y era dirigido por un entrenador argentino, que le enseñó la necesidad de hablar fuerte en el terreno de juego.
“Alguna vez tuve un técnico en el Tolima que se dio cuenta que yo tapaba, pero no hablaba nada, era muy callado, demasiado tímido, por esa razón una vez me dijo: ‘Mira viejo si no vas a hablar mejor no te dediques al arco porque hasta los hinchas te van a patear, si usted prende el radio, habla y avisa, no te llegan veinte tiros te llega uno, usted vera’”, explicó.
Por último, el técnico ibaguereño recordó el momento en que empezó a comunicarse con sus compañeros en la cancha, y reconoció que los concejos del estratega fueron de gran utilidad porque le ayudaron a forjar su carácter y su manera de ver el fútbol, desde lo estratégico.
“Entonces comencé a hablar, a gritar y me di cuenta que todo el mundo estaba pendiente y comprobé que casi no me llegaban. Desde ese momento comencé a ordenar, dirigir y a tener un concepto y una idea más clara del fútbol, también a captar lo que el técnico quería que se hiciera, entonces desde atrás comenzaba a trabajar a mis centrales, a mis laterales para que no les ganaran la espalda y al volante de primera línea para que no se me fuera…”, finalizó.