El belga Thibaut Courtois le recriminó a Mendy sobre el césped su indiferencia sobre el césped
El francés Ferland Mendy fue protagonista negativo del clásico, que ganó el Barcelona 3-0 al Real Madrid, por su bajo rendimiento defensivo en los 45 minutos que pudo aguantar en el terreno de juego antes de tener que retirarse por una lesión en la parte posterior de la pierna derecha.
El técnico italiano Carlo Ancelotti le dio la titularidad en el partido más importante, por el rival, de la pretemporada. Le incluyó en un once que perfectamente podría ser el titular en el estreno liguero el próximo 12 de agosto en San Mamés frente al Athletic Club, pero el futbolista no le devolvió la confianza.
Arrancó sufriendo en cada acción en la que su compatriota, Ousmane Dembélé le encaraba. No era rival fácil, uno de los extremos más desequilibrantes del mundo, pero tampoco pudo ponerle en aprietos.
Sin embargo, dentro de una defensa madridista que a nivel grupal no estuvo acertada, fue su falta de intensidad la que desesperó incluso a sus compañeros.
Como muestra de ello, la dejadez en el minuto 26 para recuperar su posición tras la pérdida de su equipo. Bajó al trote, despacio, mientras el francés Eduardo Camavinga le cubría las espaldas, y no llegó a su puesto hasta que la jugada acabó; momento en el cual el belga Thibaut Courtois le recriminó sobre el césped su pasotismo.
No hizo gala tampoco en ataque de la virtud que se le presupone, y mostró en el pasado, como el poderío físico, y acabó siendo sustituido por lesión en el minuto 45 después de un error al intentar despejar un balón que provocó un mano a mano de Dembélé con Courtois, que ganó este, y tras el que apoyó mal la pierna derecha y se hizo daño.
De tener que reivindicarse después de perderse 23 partidos la pasada temporada por dos lesiones musculares, separadas por ocho días desde el fin de una al principio de otra, a ser señalado durante la pretemporada.
Mientras, Fran García, pide paso. El español volvió al Real Madrid este verano después de tres grandes temporadas en el Rayo Vallecano para reforzar una posición en la que Ancelotti tuvo que ‘inventarse’ a un lateral izquierdo por "necesidad" que acabó siendo habitual en dicho lugar: Camavinga.
El galo sumó 17 partidos como lateral izquierdo, lejos de sus posiciones favoritas en el centro del campo, como interior o pivote, por las repetidas ausencias de Mendy.
Una circunstancia que la dirección deportiva y técnico madridista quisieron remediar este verano con la incorporación de un Fran García que, al contrario que Mendy, sí aprovechó sus minutos para ganarle la partida de la titularidad en el futuro al francés.