Los insultos y gestos ofensivos entre jugadores del Real Madrid y Mallorca ensucian la semifinal de la Supercopa de España.
YEDA (Arabia Saudí) -- El altercado protagonizado este jueves por jugadores del Real Madrid y del Mallorca al término de la semifinal de la Supercopa de España ganada por el equipo blanco (3-0), con cruce de insultos y gestos ofensivos, puso un borrón al desarrollo del partido.
En el último suspiro del encuentro, cuando el Real Madrid celebraba el tercer gol anotado por Rodrygo y el árbitro De Burgos Bengoetxea se disponía a pitar el final, varios futbolistas se enzarzaron en el centro del campo y tuvieron que ser separados, entre ellos, por el entrenador del conjunto blanco, para evitar que fuera a más.
La tensión entre algunos de los jugadores durante el partido, en particular entre el brasileño Vinícius Júnior y el argentino Pablo Maffeo, derivó en la pelea justo cuando el árbitro iba a pitar el final del partido.
En un lance del juego, al delantero madridista se le leyó en los labios al dirigirse a su marcador: "Eres malísimo. Vas a casa".
En el Mallorca, atribuyeron a un manotazo de Jude Bellingham a Maffeo el origen de la trifulca.
Durante la tangana, intervinieron varios jugadores, entre ellos, Raúl Asencio, el canterano del Madrid, que se dirigió a Johan Mojica y Copete, que reaccionaron a lo que consideraron una provocación cuando lanzó besos a los rivales.
"A Asencio le animo a que, con la juventud que tiene, que tiene muchos partidos importantes en su carrera, que aprenda a ganar porque le va a venir mejor. No estuvo bien", le recomendó el mallorquinista Dani Rodríguez.
Los insultos prosiguieron en el túnel de vestuarios, donde algunos miembros del cuerpo técnico del conjunto madrileño tuvieron que sujetar a Vinícius.
En la rueda de prensa posterior al partido, Carlo Ancelotti opinó que fue "una pelea innecesaria" porque el partido ya estaba acabado.
"No tiene sentido. No echo la culpa a nadie, ni a los jugadores del Mallorca, ni a los del Real Madrid. Pero una pelea así era innecesaria. Los jugadores estaban un poco calientes. He intentado calmar las aguas un poco con Maffeo. Al final no ha pasado nada, pero no era necesario", enfatizó el técnico italiano.
Su homólogo del Mallorca, Jagoba Arrasate, dijo desconocer las causas que la motivaron: “Estaba pendiente del final del partido, porque si pasa algo lo acarreas en liga y estaba más pendiente de eso. Es verdad que algún jugador nuestro estaba fuera de sí, seguramente por esos dos goles. No sé si ha habido algo más. Me ha pillado lejos. No sé qué ha pasado”.