MADRID -- Diego Simeone tiene a la afición del Atlético de Madrid en vilo. Tres días después de perder en la tanda de penales su segunda final de Champions League en tres años ante el Real Madrid, el técnico del cuadro rojiblanco no ha dicho una palabra después de declarar que se planteaba "pensar" en su continuidad al frente del cuadro colchonero.
Su futuro pudo empezar a esclarecerse este martes, luego de que su hermana y representante Natalia Simeone, fuera cazada por las cámaras de la televisión española a su llegada al Vicente Calderón, donde acompañada por el preparador físico Oscar Ortega, asistió a una reunión con miembros de la directiva rojiblanca que se extendió a lo largo de unas tres horas.
Cabe destacar que la visita de la hermana y representante del 'Cholo' a las oficinas del Atlético de Madrid es algo habitual en ésta época del año, pues Simeone suele comenzar la planificación del siguiente ciclo apenas concluye la temporada, y en ese sentido, su presencia en la ribera del Manzanares podría resultar tranquilizadora para la afición colchonera, que desde el fin de semana se ha movilizado para pedir al argentino que permanezca en la institución hasta el término de su contrato en 2020.
Desde el pasado domingo, los aficionados rojiblancos lanzaron una campaña en las redes sociales con la etiqueta de #CholoQuédate que ha culminado con la concentración de más de mil personas en los aledaños del Vicente Calderón en la tarde del martes tanto para agradecer a los jugadores su entrega durante la campaña como para pedir al técnico, de nuevo, que permaneciera en casa.
De momento, la directiva rojiblanca tiene varios asuntos con mayor urgencia que resolver: las renovaciones del capitán Gabi, quien firmaría una extensión de contrato hasta 2018, y la de Fernando Torres, quien de acuerdo a varios medios de comunicación españoles firmará un contrato por dos años.