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Barcelona golea, despliega un juego soberbio y hace temblar a LaLiga

Fue una noche de celebraciones y de una actuación intimidante y soberbia para el Barcelona.

Antoine Griezmann festejó su cumpleaños 30 con un gol, Lionel Messi su récord absoluto de 768 partidos con la playera azulgrana con dos tantos y una asistencia a Sergñe Dest, quien así se estrenó en la lista de goleo en LaLiga.

Todo esto ayudó a que Ronald Koeman celebrara la extensión de victorias a domicilio del cuadro catalán a nueve con la goleada por 6-1 sobre la Real Soceidad.

El Barcelona celebró un triunfo con goleada en San Sebastián para subir otro escalón y ya nadie deja de creer alrededor del Camp Nou.

Diez goles en los dos últimos partidos y cinco victorias consecutivas desde aquél impensable empate en el Camp Nou ante el Cádiz han relanzado a un Barça que disfruta de su momento más feliz de la temporada y que respondió a la ajustada y sufrida victoria del Atlético sobre el Alavés con un aplastante triunfo sobre una Real Sociedad que le plantó cara al inicio, pero que acabó arrodillada ante una exhibición sin disimulo.

Koeman, después de tocar y retocar el esquema, parece haber encontrado la piedra filosofal para este Barça que a partir de los tres centrales, con Frenkie de Jong poco retrasdado, ha olvidado las dudas para convertirlo todo en certezas.

Por tercera jornada, el técnico holandés repitió alineación y sin caer en la cuenta de que ese nuevo esquema penaliza el juego por bandas, se destaca de forma soberbia que este 3-5-2, con Messi por detrás de los puntas, se ha convertido, o así parece, en un esquema indiscutible.

Desde aquel 1-1 contra el Cádiz, que siguió en el calendario al durísimo 1-4 ante el PSG en la Champions, el acelerón futbolístico del Barça es una constante con un comienzo fenomenal de los dos partidos consecutivos ante el Sevilla, con victoria trascendental en el Pizjuán para relanzarse en la Liga y conquistar una remontada magnífica en la Copa.

Con 10 jornadas por delante para el final de LaLiga, nadie podría hoy apostar de manera indiscutible por el Atlético de Madrid, que ya antes de ganar por la mínima al Alavés (victoria rescatada por el penalti que atajó a última hora Oblak), dejó patente que atraviesa un momento especialmente complicado tanto en juego como en resultados.

El Real Madrid aprieta los dientes con Karim Benzema como estilete y el Barça disfruta de una catapulta de futbol que recuerda a aquella segunda mitad de la temporada 2003-04.

La diferencia es que, actualmente, no debe remontar una clara desventaja y que con 30 puntos por delante y tras sumar 37 de los últimos 39 o enlazado 18 jornadas sin conocer la derrota, el sueño se contempla más cercano que nunca.

El Barça intimida y lo hace de manera soberbia.