BARCELONA -- Antoine Griezmann, a pocas horas de ponerse a las órdenes de Ronald Koeman para iniciar la pretemporada, no tiene ninguna noticia sobre su posible intercambio con Saúl para volver al Atlético de Madrid.
Fuentes cercanas al jugador aseguraron a ESPN Deportes que el Barcelona no se ha comunicado con él y que hoy por hoy, después de atender a una posible marcha, su intención es comenzar la pretemporada con normalidad y el convencimiento de seguir en el Barça, que después de ver con muy buenos ojos la operación la ha frenado por el nulo beneficio económico y deportivo que contempla.
"Nadie ha dicho nada. Ni palabra", se asegura desde el entorno del delantero francés, sin entrar a valorar las declaraciones del presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, quien durante una entrega de premios en la capital de España sentenció que "en el mundo del futbol todo es posible" y aunque alertó que en primera persona "no tengo ni idea" deslizó a los periodistas que "queda poco para que sepan lo que va a pasar".
Griezmann, que regresó anticipadamente a Barcelona de sus vacaciones alertado por la posibilidad de acelerarse la operación, está ahora convencido de permanecer en el club azulgrana y comenzará a entrenar este mismo martes. Su presencia en el amistoso del miércoles frente al Nàstic de Tarragona no está en los planes de Ronald Koeman, que sin embargo sí contaría con él para el choque del sábado contra el Girona.
El Barcelona considera la salida de su futbolista desde un punto de vista económico, necesitado como está de rebajar su masa salarial para encajar tanto la ficha de Leo Messi como de los demás fichajes, pero en sus planes no cuadran las cifras que contempla el Atlético de Madrid, por lo que la operación está hoy por hoy lejos de realizarse.
El club azulgrana, al que le restan 70 millones de euros por amortizar del fichaje de Griezmann, no acepta un intercambio sin ninguna compensación económica, entendiendo que el valor del francés es bastante superior al del mediocampista colchonero. A ello se añade que el Barça ni se plantea pagar parte del salario que recibiría el delantero en el Atlético, que no llegaría a ofrecerle los más de 20 millones que le cuesta al Barça porque escaparía a su límite salarial.