Ninguno logró inclinar la balanza: Chelsea y Liverpool igualaron en la primera jornada de la Premier League 2023/24 1-1 en Stamford Bridge.
El partido fue de un ritmo alto, atractivo y digno de fútbol inglés, que pudo haber ganado cualquiera, entre dos equipos con problemas. Distintos, sí, porque los Blues vienen de una pésima temporada en la que se quedaron sin actividad internacional y con varias caras nuevas por la renovación; y los Reds con su clásico heavy metal, pocos refuerzos y la apuesta para que Klopp logre explotar al máximo un plantel con buena materia prima.
Y Chelsea fue quien empezó mejor, tocando y buscando permanentemente el arco defendido por Allison Becker. Pero solo duró 18 minutos esa supuesta superioridad, porque un pase preciso en largo de Alexis Mac Allister encontró a Mohamed Salah por derecha, y el egipcio encaró para el medio y tiró una asistencia perfecta para la llegada en diagonal del "Guajiro" Luis Díaz. 1-0 y ventaja para los de Klopp, que no se quedarían ahí.
Minutos después, a los 29', un gran pase en profundidad de Alexander Arnold ante una defensa que volvería a repetir el problema de salir en línea encontraría a Salah mano a mano con Robert Sánchez para ampliar la ventaja. Pero el VAR comprobó que el atacante estaba en fuera de juego; milimétrico, pero fuera de juego al fin.
Y Chelsea reaccionó: a los 36', un centro de Enzo Fernández luego de un córner rechazado por vía áerea terminó con una segunda pelota también impulsada de cabeza que encontró a Axel Disasi mano a mano con Allison, y el defensor llegó al empate, aprovechando que Alexander Arnold había quedado enganchado habilitándolo.
Y dos minutos después, llegó el segundo de los Blues, que parecían llevarse por delante a Liverpool, aunque la conquista fue anulada también por un offside milimétrico. Un gran pie a pie de Enzo Fernández -de gran partido como eje en los locales- culminó con una asistencia entre líneas para Ben Chilwell que, apareciendo como delantero, dejó por el camino a Allison y definió con el arco libre.
La primera mitad se iría y en la segunda, con un ritmo más bajo, se repetiría la tónica: ataque y ataque de cada equipo buscando el arco rival, pero esta vez sin éxito.
No hubo grandes chances en el complemento para inclinar la balanza y Blues y Reds terminaron sin poder romper la estadística: es el quinto empate consecutivo entre ambos, aunque la diferencia fue que los cuatro anteriores habían sido sin goles. Esta vez, aún marcando, repartieron puntos en un debut difícil.