Cuando le pidieron que resumiera la relación entre el entrenador Erik ten Hag y la nueva dirigencia de Manchester United de cara a la próxima temporada, una fuente del club dijo sin rodeos: "Es como un matrimonio en el que alguien ha sido infiel. Ahora vuelven a estar juntos y están intentando que funcione".
Los paralelismos son evidentes. El copropietario de United Sir Jim Ratcliffe y su equipo de INEOS, encabezado por Sir Dave Brailsford, no ocultaron sus dudas sobre Ten Hag al final de la temporada pasada. Se reunieron con posibles socios nuevos, entre ellos Thomas Tuchel y Roberto De Zerbi, y finalmente decidieron quedarse con el entrenador que tenían desde el principio. Ratcliffe y Brailsford han intentado crear cierta sensación de estabilidad ampliando el contrato del neerlandés un año más, que, en teoría, lo mantendría en Old Trafford hasta 2026.
Pero de cara al primer partido de la temporada contra Manchester City por la FA Community Shield este sábado (se verá en vivo por Disney+), sigue habiendo una sensación de incertidumbre y muchas preguntas sin respuesta. ¿United está más cerca del equipo que acabó octavo en la Premier League la temporada pasada, o del que superó a City por 2-1 en la final de la FA Cup? ¿Podrá Ten Hag aprovechar al máximo su segunda oportunidad, y por cuánto tiempo estarán Ratcliffe y Brailsford dispuestos a apostar por él?
Hubo momentos en abril y mayo en los que Ten Hag se mostró visiblemente agitado por las preguntas sobre su cargo, pero durante la pretemporada se lo vio mucho más relajado. Se ha negado a criticar a INEOS, el conglomerado dirigido por Ratcliffe, por la forma en que actuó después de la final de la FA Cup, y en cambio ha hecho todo lo posible por aceptar la rama de olivo que le tendieron.
Ten Hag dijo en una entrevista durante la gira por Estados Unidos que la fe de Ratcliffe sólo quedaría demostrada en los malos momentos, pero, según las fuentes, entiende que la forma de reforzar su posición es arrancando con buen pie. La Community Shield contra City -un partido a medio camino entre un amistoso de pretemporada y algo más serio- no es un referéndum sobre su futuro, pero está cerca.
Las derrotas de pretemporada ante Arsenal y Liverpool en Estados Unidos han sido en gran medida pasadas por alto, pero una derrota ante City volvería a hacer ruido en torno a Ten Hag. Y otro mal resultado en el arranque de la Premier League contra Fulham en Old Trafford el próximo viernes sólo levantaría el volumen de aquellos que piden un cambio.
La temporada pasada, la sensación fue que Ten Hag quedó inmediatamente en la cuerda floja tras una actuación mediocre contra Wolverhampton Wanderers el primer fin de semana, y no puede permitirse que algo así se repita, sobre todo ante Ratcliffe, Brailsford, y los recién contratados Omar Berrada (CEO) y Dan Ashworth (director deportivo).
Cuando les pedimos que recuerden el inicio de la temporada pasada y la antesala de ese partido contra los Wolves, las fuentes le dijeron a ESPN que incluso entonces ya había una sensación de que algo "no estaba del todo bien".
Fue una gira difícil por Estados Unidos, con demasiados viajes y poco tiempo libre para los jugadores. En retrospectiva, no fue una gran sorpresa para aquellos que estaban dentro del club que United arrancara con seis derrotas en sus 10 primeros partidos. A partir de ahí, la temporada nunca se recuperó del todo. Este verano, Ten Hag ha suavizado su enfoque y permitió que los jugadores salieran a tomar café en Rodeo Drive durante el tiempo libre entre las sesiones de entrenamiento.
Un cambio en el itinerario también fue bienvenido, eligiendo un campo de entrenamiento de 10 días en UCLA, en Los Angeles, antes que paradas en múltiples ciudades con diferentes zonas horarias. En general, el verano terminó de manera positiva, pero eso no significa que los problemas se hayan disipado.
Las lesiones que los afectaron la temporada pasada están recuperadas después de un descanso de tres meses para la nueva incorporación, Leny Yoro, y de una ausencia de seis semanas para el delantero, Rasmus Højlund, ambos afuera en el primer partido de pretemporada contra Arsenal.
Harry Maguire, Victor Lindelöf, Luke Shaw y Aaron Wan-Bissaka están en duda de cara al partido contra City, lo que podría dejar a Ten Hag con apenas tres defensores senior en buena forma física en Wembley, con Lisandro Martínez, Diogo Dalot y Jonny Evans disponibles. Los fanáticos de United se han acostumbrados a que Ten Hag elija el equipo más fuerte disponible en cada partido – sobre todo cuando hay trofeos en juego – pero dijo más de una vez en su conferencia de prensa del jueves que no correrá ninguna clase de "riesgos" contra City.
Al hacerlo, dejó en claro que no quiere que se repitan las cuestiones que jugaron un rol clave en los problemas de la temporada pasada. La preocupación es que, si sufren más lesiones, Ten Hag va a tener que lidiar en gran medida con el mismo equipo con el que terminó 2023-24. Yoro entró para reemplazar a Raphaël Varane y Joshua Zirkzee, para reemplazar a Anthony Martial, pero muchas de las mismas dudas siguen en pie.
¿Hay suficientes goles? ¿Casemiro es lo suficientemente bueno como para ser la primera elección en el mediocampo? ¿Cuál sería la mejor posición para Mason Mount? Y la lista sigue. Idealmente, United desearía fichar a otro defensor central, un zaguero y un mediocampista central antes del cierre de la fecha de pases, pero, en este momento, lo que se comenta es que el plantel no está más fuerte que lo que estaba hace 12 meses.
Hasta ahora, ha sido un mercado de pases tranquilo para muchos equipos, pero los fans comenzarán a preocuparse si Ten Hag aparenta sentirse conforme con las opciones que tiene a su disposición.
"Sabemos qué es lo que estamos haciendo y nos encontramos en una buena posición con el equipo", dijo el jueves. "Contamos con un plantel en el que en cada posición tenemos doble ocupación".
La cuestión, sin embargo, no es la cantidad de jugadores que tiene, sino si es que son lo suficientemente buenos o no para poder mejorar las actuaciones del año pasado. Dejando de lado todos los problemas que experimentó Ten Hag la campaña pasada, al menos terminó con un trofeo y esta semana se lo recordó a su escuadrón.
Con todos de regreso en Carrington por primera vez este verano, convocó a una reunión para mostrarles a sus jugadores imágenes de las celebraciones después de levantar el trofeo de la FA Cup. Les dijo que recordaran la sensación y los desafió para que lo hicieran de nuevo.
Superar a City en Wembley hace dos meses ayudó a que Ten Hag pudiese conservar su puesto. Si vuelve a hacerlo el sábado, logrará dar un primer paso positivo para comenzar a dar respuestas y asegurarse de que su matrimonio por conveniencia con Ratcliffe e INEOS termine convirtiéndose en uno feliz.