El torneo nacional más antiguo de la historia tiene un solo rey y ese es el Arsenal. La Copa FA es considerado como el primer certamen en el mundo del futbol que se llegó a disputar y del cual, los ‘Gunners’ han forjado su legado.
Ahora, en una etapa de transición y lejos de una regularidad que augure una campaña plagada de éxitos o siquiera para el recuerdo, el equipo del norte de Londres busca ese impulso único que le da la Copa FA, certamen que ha levantado en 13 ocasiones en su historia. Más que cualquier otro equipo en Inglaterra.
La relación entre los ‘Gunners’ y este torneo es especial. Tienen una notable empatía, particularmente en este siglo en el que han levantado seis de sus 13 conquistas. Y es justamente esa razón y ese entendimiento del que buscan sacar provecho para caminar en una campaña llena de cambios, polémicas y de derrotas.
El camino en la Premier League no ha sido el mejor para un equipo que ha perdido terreno ante gigantes actuales del negocio como Manchester City, Liverpool y hasta de sus acérrimos rivales como el Tottenham, con todo y que tampoco pasan su mejor momento.
En la Premier, después de 24 partidos, Arsenal apenas suma 30 unidades, con lo que está en la décima posición, a 37 del líder Liverpool. Ni siquiera multiplicando por dos sus puntos actuales, alcanzarían a unos ‘Reds’ indomables. Y si bien el título no es tema de conversación para los ‘Cañoneros’, sí que lo es su próxima participación en competencias europeas, algo para lo que todavía están lejos.
Para aspirar a puestos de Champions, el Arsenal debe superar a equipos como Manchester City, Leicester o Chelsea, que es el más cercano de ellos y eso que están a 10 puntos de distancia; para lugares de Europa League, en tanto, están a cuatro unidades de ello, distancia que difícilmente han logrado recortar, gracias a sus 12 empates, seis derrotas y el mismo número de victorias.
Pero es aquí cuando la Copa FA recobra una importancia mayor, ya que también otorga boleto para Europa League. Para ello, el panorama puede lucir tan alentador y cercano, como a cinco victorias consecutivas o tan cruel y distante como a una derrota y a la calle. Los ‘Gunners’ lo tienen bien en mente y de eso se quieren hacer valer para cumplir con uno de sus objetivos a estas alturas de la temporada.
“Vamos a pelear por cada competencia en la que estemos presentes. Sé lo que significa para este club ganar este torneo y necesitamos volver a las victorias. Necesitamos estar de vuelta arriba y que estén hablando de nosotros. Tratamos de hacerlo en cada torneo”, recién reconoció el entrenador Mikel Arteta, quien está por dirigir apenas su octavo partido al frente de los londinenses. Curiosamente será el segundo que dispute frente al Bournemouth, club ante el que debutó como estratega oficialmente hace un mes.
“Muchas cosas que he querido implementar (desde mi llegada), no solo con los jugadores, sino alrededor del club. Muchas cosas acerca de nuestra manera de jugar, más allá que las circunstancias en algunos partidos lo han hecho un poco más difícil de lo presupuestado”, compartió el mismo Arteta acerca de su primer mes al frente del club.
Los pendientes de Arteta
La llegada del entrenador español al Arsenal significó un nuevo aliento para una afición que añora los éxitos de inicio de siglo bajo la tutela de Arsene Wenger, a quien cuestionaron mucho en sus últimos años al frente del club, aunque con el paso del tiempo también notaron que no era el problema del equipo.
En el mes que lleva al frente de la plantilla, los números de Arteta están lejos de ser espectaculares. En sus siete partidos como entrenador, suma apenas dos triunfos, por cuatro empates y una derrota. Lo que sí que ha sido distinto es la conexión con los aficionados, quienes al menos en cuanto a las actuaciones y estado del equipo, han notado una diferencia con respecto a los últimos días de Unai Emery como estratega.
“Pienso que una de las cosas más importantes que hemos creado es la conexión con nuestros aficionados”, destacó Arteta en rueda de prensa.
“Hace tiempo que veíamos la reacción ni apoyo de nuestros aficionados como fue en el juego frente al Chelsea. Fue increíble y en algunas etapas fue como si estuviéramos jugando en casa. Su apoyo fue increíble en circunstancias difíciles y estoy orgulloso que ahora se sientan un poco más cercanos al equipo”, valoró el timonel.
Ahora entre esos pendientes se avecina el encuentro de la cuarta ronda de la Copa FA frente al Bournemouth en el que al Arsenal no le vale otro resultado más que el triunfo para seguir con vida en su competencia favorita de por vida.