Everton derrotó 4-1 a West Ham United en los octavos de final de la Copa de la Liga y se clasificó a la siguiente fase del campeonato. El conjunto de Liverpool realizó un excelente trabajo en el estadio Goodison Park, con una gran actuación de James Rodríguez y continúa invicto en lo que va de la temporada.
Sin embargo, el conjunto del entrenador Carlo Ancelotti tuvo algunos problemas durante el compromiso, asociados con tres de sus jugadores más importantes en la construcción del juego ofensivo, y que hacen parte del circuito de creación de James. Los futbolistas Jonjoe Kenny, Richarlison y Allan tuvieron que dejar la cancha porque se lesionaron.
El más perjudicado con la salida de los futbolistas fue el volante colombiano, quien se apoyaba en el juego de sus compañeros para producir jugadas de peligro en el arco del West Ham.
Jonjoe Kenny se lesionó en el minuto 38 del primer tiempo tras una jugada en ataque del equipo rival, en la que intervino para evitar un centro por el costado derecho y terminó sufriendo una lesión en su tobillo derecho. El lateral era una de los jugadores que apoyaba el ataque de James Rodríguez por la banda derecha. Con su salida el equipo perdió profundidad.
Richarlison salió lesionado en el minuto 61 del segundo tiempo luego de una jugada en la que intentó ayudar en la marca, recuperando un balón por la banda derecha, pero con tan mala fortuna que terminó sufriendo una torcedura en su tobillo. El brasileño había acabado de marcar el 2-1 a favor de los Toffes y venía haciendo un buen partido, asociándose en muchas ocasiones con James. Su salida la sufrió el colombiano que se quedó sin uno de los jugadores con los que más tenía contacto en el ataque.
El último en salir del partido fue Allan Marques Loureiro, que en una jugada por la banda izquierda, intentando ayudar en la marca al lateral Seamus Coleman, sintió un pinchazo en su muslo izquierdo y tuvo que abandonar la cancha con muchos síntomas de dolor. Con su partida, James se quedó sin otro de los jugadores importantes en el circuito ofensivo del equipo, teniendo que adaptarse a las circunstancias del partido e improvisando en el ataque con sus movimientos habituales en el último tercio de cancha.
Al final del partido, el entrenador italiano habló en conferencia de prensa en donde confirmó las lesiones de los jugadores y señaló que no parecen tan delicadas.
“No creo que las lesiones sean tan graves. Kenny y Richarlison tienen torceduras de tobillo y Allan tuvo un leve problema con el aductor. Lo veremos mañana pero no parece tan malo”, dijo el D.T.
Everton enfrentará a Brighton el próximo sábado 3 de octubre, en condición de visitante, en juego correspondiente a la fecha 4 de la Premier League. Por el momento, marchan en la tercera posición en la tabla general del campeonato con 9 puntos.