Afición de Chivas mostró molestia, luego de la derrota 1 a 3 ante Monterrey, con Víctor Manuel Vucetich en el banquillo rival
Cerca del final del encuentro entre Chivas y Monterrey, se hizo presente de nueva cuenta el popular grito discriminatoria en la grada del Estadio Akron, como protesta por la nueva derrota del conjunto rojiblanco en casa.
En tiempo agregado, en uno de los despejes de Esteban Andrada la afición de Chivas entonó el popular grito homofóbico, sin embargo, el sonido local evitó que el árbitro central se percatara del grito, luego de que en cada despeje se presenté un grito de apoyo para Chivas.
Posteriormente, en el segundo despeje, pese a sonar el sonido local, la afición del Guadalajara se hizo sentir con el grito homofóbico, motivo por el que el árbitro central Diego Montaño Robles pidió el esférico para sancionar que percibió el grito.
Después del segundo grito, se reanudó el encuentro, y pese a que el sonido local se hizo presente advirtiendo que evitarán entonar el popular grito, la afición respondió con otro grito en el despeje de Esteban Andrada, sin embargo, el árbitro central no detuvo el encuentro por la reiteración.
Fue hasta que se reanudó la jugada, cuando en un saque de manos del conjunto de Monterrey, la afición de Chivas entonó por tercera ocasión el grito discriminatorio, motivo por el que el árbitro detuvo las acciones y reunió a los futbolistas al centro del campo, como parte del protocolo establecido.
Con el tercer grito el sonido local, anunció que el juego se detendría por cinco minutos, con la finalidad de que el grito no se vuelva a presentar, ante el mensaje, la afición comenzó a protestar y quejarse con gritos y abucheos.
Después de que se detuvo el encuentro por cinco minutos, los gritos continuaron en el Estadio Akron, sin embargo fue el mismo árbitro quien determinó concluir con el partido.