GUADALAJARA -- El gigante ya despertó. 365 días después de haber hecho la promesa de regresar a Chivas al protagonismo, Matías Almeyda recalca que cumplipó el cometido.
“Sí se despertó, se despertó porque pasó a ser un equipo competitivo, que pudo conseguir dos títulos, entrar a la liguilla, siempre hay que ir por más, no podemos conformarnos con eso, a hoy el equipo se ve mejor. Soy un agradecido de los jugadores. Este año nos han mostrado que podemos seguir creciendo, ir por más”.
Almeyda señala que corre por sus venas una sangre roja y blanca, siendo parte de una historia rica del club.
“Estoy feliz de ser parte de la historia de Chivas, deseo de todo corazón que se extienda por mucho tiempo más y para eso hay que seguir trabajando y mejorando”.
Con el aprendizaje que ha adquirido, el estratega cambiaría del fútbol mexicano el Régimen de Transferencias, al sufrir por ver en Cancún jugadores que buscaban una oportunidad para continuar con sus carreras.
“Sacaría el draft, me tocó vivirlo y me ocasionó tristeza ver jugadores como un mercado no de futbolistas, sino de otras cosas, serviría para mejorar un poco, por la parte humana del jugador”.
“Estaría bueno que se junte la parte dirigencial, que se vea el tema, que no sea un mercado, el jugador merece respeto, también el respeto porque la organización está, los clubes tienen la posibilidad de contratar y por ahí darle una vuelta para que sea un poco diferente porque por lo que he hablado, a pocos le gusta”.
Señaló que la comunicación que ha tenido con Jorge Vergara ha sido importante para el éxito que ha tenido en el club y niega aspirar a una selección en un futuro, ya que su presente es Chivas.
“Tengo un gran diálogo con Jorge, no de todos los días, pero sí de momentos claves, de compartir diferentes pensamientos, ideas, me ha hecho crecer, trato con mi trabajo poder que esa persona se alegre, es el dueño, es quien decide, pero el diálogo de plena sinceridad hace que esta relación crezca. Ojalá que sea por muchos años más que pueda seguir trabajando en Chivas, lo otro no lo pienso, voy día a día, partido tras partido, mi mente está enfocada en cada partido que enfrentamos, dios dirá y el destino, el futuro es incierto y el pasado ya no existe”.