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Pumas enfrenta al León, en una reedición devaluada de la final del torneo Apertura Guard1anes 2020, pues tras ser los mejores equipos del año pasado, ambos se reencuentran muy lejos de lo que mostraron entonces en cuanto a puntos y resultados. A dos meses de disputar esa final, la realidad es diametralmente opuesta para los clubes felinos. El León, vigente campeón con un partido pendiente, ha disputado cinco partidos tras coronarse en esa final, con un triunfo, un empate y tres derrotas. Pumas, subcampeón, también ha ganado uno, perdió tres y empató dos. ¿QUÉ CAMBIÓ?
En el caso de Pumas, el cambio ha sido drástico, pero tiene un factor muy claro en contra: la salida de Carlos González, quien fue vendido a Tigres. El compañero de Dinenno en el ataque no tuvo su mejor temporada el torneo pasado, pero su aporte era fundamental para los universitarios, lo que se conjugó con la lesión del goleador argentino. Así, aunque Juan Ignacio está por reaparecer, Pumas perdió a sus dos referentes. Otra salida importante fue la de Andrés Iniestra, su capitán, pero en este caso su función no era tan determinante como la de González. Pumas suma tres goles, y los hizo todos en su único triunfo, por lo que parece muy claro su problema, que podría resolverse si reaparece Dinenno y se conecta rápidamente. En cuanto a los Esmeraldas, la salida del peruano Pedro Aquino fue la más relevante, pero no parecía un jugador tan fundamental como lo era González en Pumas, por lo que sí es más preocupante el cambio radical. Su defensa ha sufrido, pues León solo ha marcado cuatro goles y ha recibido el doble. Ambriz tiene muchas más armas que Pumas para recuperar el buen semblante, y podría aprovechar su duelo de este domingo ante un rival que presenta los mismos síntomas. El protagonismo de Talavera, señalado en el juego de vuelta de la Final por el gol que les costó perder el título, puede ser un alivio a la situación grave, mientras el León mantiene la base del campeonato, por lo que será más probable que pronto alcance su mejor desempeño.
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