En el partido inaugural de las Eliminatorias rumbo al Mundial 2026, Chile visitó a Uruguay en el Estadio Centenario de Montevideo, un reducto que en la previa aparecía como inexpugnable para La Roja, sin ningún triunfo en nueve encuentros, donde sólo igualó uno de ellos en 2007.
El trámite del encuentro arrancó con punzantes llegadas del local gracias a las arremetidas de Darwin Núñez, quien exigió al portero Brayan Cortés antes de los 15 minutos.
Eduardo Berizzo dispuso una retaguardia con cuatro defensas encabezados por Gary Medel y Maripán de centrales, junto a Suazo en izquierda y la sorpresiva inclusión de Nayel Mehssatou por la banda derecha. Un planteamiento que se acopló al mediocampo formado por Pulgar, Aránguiz, Marcelino Núñez y Valdés, dejando a Brereton y Alexander Aravena en ataque.
El duelo en el primer tiempo fue de un marcado estudio para ambos conjuntos y parecía que se iban en blanco al descanso, sin embargo, a los 38’, una gran jugada armada entre el delantero del Liverpool y definida por Nicolás de la Cruz terminó con la pelota dentro del arco para el 1-0 de los charrúas.
Y el mazazo para Chile llegaría sobre los descuentos de la primera parte, con Federico Valverde que recibió en su zona de confort, a pocos metros de la entrada del área, enganchó sobre su marca y sacó un remate rasante, potente y colocado que batió por segunda vez la resistencia de Cortés.
En el complemento, Berizzo no hizo cambios en el inicio y fue Brereton quien tuvo la chance más cercana para los nacionales, con una aproximación que no logró rematar dentro del área.
No obstante, La Celeste contestaba con ataque rápidos y un nuevo gol estaba a boca de jarro, sobre todo tras un remate de Facundo Pellistri que se fue sobre el travesaño.
Y así llegó el tercero, luego de una pelota que perdió Erick Pulgar en el medio y generó una ráfaga charrúa que volvió a finiquitar de la Cruz, nuevamente asistido por Núñez a los 71’.
Tras cartón, vino una reacción chilena, con el recién ingresado Arturo Vidal que logró cazar un rebote tras un cabezazo de Diego Valdés que había pegado en el palo; como pudo, el volante del Paranaense conectó con su pierna derecha para el 3-1 parcial a los 74 minutos.
Para Vidal, significó su gol 34 por la selección chilena y un golpe anímico para un equipo que estaba apagado y perdido ante la goleada uruguaya.
Después del descuento rojo, el local se dedicó a administrar su ventaja y logró sellar un debut ganador por Eliminatorias, con un esquema de Marcelo Bielsa que se notó en varios pasajes del segundo tiempo, donde el vértigo fue uno de los condimentos de un duelo en el que sus dirigidos supieron sacar las diferencias necesarias.
Chile, por su parte, deberá encontrar una fórmula para enfrentar de mejor manera el desafío ante Colombia, que se juagará el próximo martes en el Estadio Monumental a partir de las 21:30 horas.