Hernán Galíndez nuevamente destacó y fue el mejor jugador en el empate de Ecuador frente a México en el Estadio Akron.
Aunque recibió un gol de entrada, la responsabilidad no estuvo en él, ya que todo nació de una desatención entre Pedro Vite y Willian Pacho. Luego el arquero fue clave y ante la presión mexicana, Galíndez estuvo firme bajo los tres palos y evitó que su portería volviera a ser derrotada.
La Tri estaba demostrando muchas falencias e imprecisiones en zona defensiva, pero el guardameta con sus manos sacó el potente remate que había realizado Erick Sánchez. El mundialista tuvo una enorme labor en Guadalajara y sus intervenciones terminaron llevando a que el combinado nacional tuviera alguna posibilidad de llevarse el amistoso.
En el complemento, bajo la intensidad de México y Ecuador, tuvo mayor protagonismo en ataque; sin embargo, llegando a la recta final del compromiso, el experimentado arquero le atajó un mano a mano a Santiago Giménez y así apagó el grito de gol del rival en el Estadio Akron.
Hernán Galíndez terminó siendo la gran figura de la Tricolor en esta jornada de amistosos, evitó que Estados Unidos y México se lleven la victoria sobre la selección ecuatoriana.
