BARCELONA -- Robert Moreno sabe que es entrenador de la selección española por accidente, que llegó al puesto por la fatalidad y sucediendo a su gran amigo y mentor Luis Enrique.
El trágico fallecimiento de la hija del ex seleccionador tocó de lleno en el equipo nacional y este martes, en su primera comparecencia ante los medios, en la preparación de los partidos de España frente a Rumanía e Islas Feroe, el técnico no dudó en ponerse a disposición de su antiguo jefe.
“Si Luis Enrique decide que quiere volver a entrenar, donde sea, y quiere contar conmigo yo seré el primero, y encantado, en dar un paso al lado y volver a trabajar con él” afirmó el técnico, que no ocultó su sentimiento.
“Hay una situación muy reciente y debemos respetar… Evidentemente no creo que se piense en eso ahora pero hay tres ruedas de prensa desde que soy seleccionador que me habría gustado no hacer. La de Malta, la de mi presentación y ésta.
“A Luis lo considero un amigo y los amigos están por encima de cualquier cosa en la vida” resaltó Moreno, quien recordó que la situación “con la que yo disfrutaba era con la que teníamos antes” y se reafirmó en que se toma esta concentración y los dos partidos a disputar “como la oportunidad de darle a Luis una alegría ínfima”.
El entrenador catalán, que se estrenará en Bucarest oficialmente como máximo responsable de la selección tras haberlo hecho de manera provisional antes de la renuncia de Luis Enrique, dio a entender que la personalidad del equipo español no variará demasiado respecto a la anterior etapa.
“Buscamos tener el balón con sentido, tenemos obsesión por convertir cada ataque en una situación de tiro” relató, argumentando la llamada de Alcácer en que “está marcando muchos goles con el Borussia y debemos intentar aprovechar ese momento de forma de los delanteros, que viven del gol”.
Líder del grupo F de la fase de clasificación para la Eurocopa con un pleno de 12 puntos tras cuatro jornadas, España se enfrentará este jueves a Rumanía en Bucarest, tercera con 7 puntos, y recibirá el siguiente lunes en Gijón a Islas Feroe, en una doble jornada que podría ser clave en conseguir, prácticamente, el billete definitivo para la fase final del próximo año.