La Selección de Ecuador consiguió una histórica victoria 2-1 frente a Brasil en la fecha 15 de las Eliminatorias, en un partido muy caliente que estuvo marcado por el arbitraje del colombiano Wilmar Roldán y por la participación del VAR.
Los fallos arbitrales y las intervenciones del uruguayo Leodan González desde la cabina del VAR tuvieron un papel muy importante en el desarrollo del juego desde el comienzo mismo.
En la primera acción de peligro del encuentro ya hubo polémica. Tras varios rebotes en el área, Casemiro marcó el gol a los cinco minutos. Todo Ecuador protestó, pero el tanto fue convalidado sin revisión.
A los 15, Alexander Domínguez salió de forma temeraria y golpeó a Matheus Cunha en la puerta del área. En principio, Roldán no cobró nada, pero el VAR intervino y el arquero ecuatoriano fue expulsado. Además, cobró tiro libre, que remató Coutinho desviado.
Pocos minutos después, Emerson vio la segunda tarjeta amarilla y la roja por decisión del juez. Entonces, quedaron diez contra diez y la Tri recuperó la confianza después de un pésimo comienzo.
A los 25, Roldán expulsó al arquero Alisson por una acción similar a la de Domínguez, pero mucho menos violenta. Otra acertada intervención del VAR quitó la roja y el guardavallas visitante solo fue amonestado.
Hasta ese momento, se había jugado muy poco y el partido era muy cortado. Ecuador tenía la pelota pero las incidencias no le permitieron tener un dominio claro, algo que consiguió por momentos en el complemento.
El VAR volvió a entrar en escena en la segunda etapa, cuando Roldán sancionó penal por una falta sobre Pervis Estupiñán. Tras la revisión quedó claro que no había sido infracción.
En tiempo de descuento, Alisson chocó con Ayrton Preciado y el juez volvió a sancionar penal, además de mostarle la segunda amarilla al arquero. Sin embargo, el VAR por cuarta vez cambió la decisión del colombiano.