El futbolista egipcio Mohamed Salah defendió hoy a su compañero de la selección Amr Warda, quien fue ayer apartado del equipo después de que varias mujeres denunciaran al jugador por supuesto acoso en las redes, y dijo que aquellos que cometen errores "no deberían ser enviados directos a la guillotina".
Women must be treated with the utmost respect. "No" means "no". Those things are and must remain sacred. I also believe that many who make mistakes can change for the better and shouldn't be sent straight to the guillotine, which is the easiest way out.
— Mohamed Salah (@MoSalah) 26 de junio de 2019
"Las mujeres deben ser tratadas con el mayor respeto. No significa no. Eso es así y debe seguir siendo sagrado. También creo que muchos que cometen errores pueden cambiar para mejor y no deben ser enviados directamente a la guillotina, que es la salida más fácil", dijo el astro egipcio en su cuenta de Twitter.
Indicó, sin mencionar en ningún momento el nombre de su compañero, que "necesitamos creer en las segundas oportunidades...necesitamos guiar y educar. Rechazar no es la respuesta".
Esta reacción se produjo después del partido en el que Egipto venció a la República Democrática del Congo (2-0) y lo clasificó para Octavos de Final de la Copa Africana de Naciones.
Ayer, la Federación de Fútbol de Egipto (EFA) anunció la expulsión del extremo egipcio Amr Warda para "mantener el estado de disciplina" del equipo después de que varias mujeres denunciaran al jugador por supuesto acoso en las redes, según un comunicado publicado en su página de Facebook.
Esta decisión tiene lugar después de que la semana pasada la modelo egipcio-británica Merhan Keller hizo públicas unas conversaciones con el futbolista de PAOK Salonika griego a través de la red social Instagram en las que Warda insistía a la "infuencer" para que le fuera a visitar a Grecia antes de que se concentrara con su selección.
Ante la negativa, la modelo aseguró que el futbolista la amenazó, además de llamarle "estúpida" y "ramera", según las capturas de pantalla de la conversación difundidas por la propia Keller.
También otras mujeres denunciaron públicamente al futbolista a través de la red social Twitter, plataforma en la que aseguraron que Warda les envió vídeos con contenido sexual.
Estas acusaciones de presunto acoso sexual llevaron al futbolista a eliminar su cuenta de más de 2 millones de seguidores en Instagram.
Esta no es la primera vez que el joven extremo está involucrado en un escándalo similar, ya que cuando militó en el PAOK Salonika portugués en el 2017 también fue acusado de acosar a dos de las esposas de sus compañeros de equipo, según la prensa lusa.