Barcelona empató con Napoli por la ida de los playoffs de la UEFA Europa League. Este partido marcó el regreso del Barcelona al certamen después de casi dos décadas, ya que la última vez que el conjunto blaugrana disputó una competición continental distinta a la Champions fue en la campaña 2003/04.
Por aquel entonces, el club del Camp Nou venía de una oscura temporada 2002/03. En LaLiga, Barcelona acabó en la sexta posición. La directiva despidió al técnico Louis van Gaal, que llevaba años en el cargo, y la decisión fue hacer una buena reformulación para el año siguiente.
Tras la salida de van Gaal, Frank Rijkaard llegó al Camp Nou acompañado de fuertes refuerzos como Ronaldinho Gaúcho, Rafael Márquez, Ricardo Quaresma y Edgar Davids. Además, algunos nombres prometedores de la cantera como Andrés Iniesta fueron promovidos al primer equipo de los profesionales.
Se sumaron a una buena base de futbolistas con talento, como el lateral Michael Reiziger, el defensa Carles Puyol, los centrocampistas Xavi (ahora entrenador del Barça), Luis Enrique y Phillip Cocu y los delanteros Javier Saviola y Patrick Kluivert.
Al mismo tiempo, varias figuras abandonaron el equipo, como el portero Roberto Bonano, el defensa Frank de Boer y los mediocampistas Fábio Rochemback, Geovanni y Juan Román Riquelme.
El "nuevo Barcelona" encajó bien, y la temporada 2003/04 fue mucho mejor que la anterior a pesar de la falta de títulos. En LaLiga, por ejemplo, los culés consiguieron terminaron en segundo lugar con el Valencia proclamándose campeón.
Era un presagio de la "era gloriosa" que vendría en los años siguientes, cuando el Barcelona volvería a dominar Europa.
Participación en la Europa League
Como terminó en sexto lugar en la temporada 2002/03, el Barcelona no disputó la Champions League en la campaña 2003/04. El premio de consolación era jugar la Copa de la UEFA, el antiguo nombre de la Europa League.
Al contrario de lo que hacen muchos gigantes cuando les toca jugar la Europa League, el club español disputó la competición de forma seria, utilizando sus titulares en la primera fase del torneo ante el Púchov de Eslovaquia.
El resultado fue un auténtico escándalo: en el partido de vuelta ante los eslovacos, el conjunto barcelonista ganó por 8-0 con un hat-trick de Ronaldinho incluido.
En la siguiente fase, el Barcelona volvió a tener un enfrentamiento sencillo. Contra el débil Panionios de Grecia, el equipo de Frank Rijkaard avanzó fácilmente con 3-0 a domicilio y 2-0 en casa.
En los octavos de final, había un rival con algo más de tradición: Brondby, de Dinamarca. De nuevo, los blaugranas consiguieron clasificarse sin mayores sustos: 1-0 con gol de Ronaldinho en la ida y 2-1 en el Camp Nou.
En los cuartos de final, el Barcelona se midió a un rival más grande: Celtic de Escocia. Y los alviverdes serían los responsables de la eliminación del conjunto culé en la Copa de la UEFA.
En el partido de ida, los escoceses ganaron 1-0 en el Celtic Park gracias a un gol del delantero Alan Thompson. En la vuelta, el marcador en la ida se mantuvo con el Barcelona sin poder anotar un gol a pesar de tener a figuras como Xavi, Luis Enrique y Ronaldinho en el campo.
Ese fue el final de la participación de los culés en la competición europea.
El Celtic fue eliminado en la siguiente fase por el sorprendente Villarreal, mientras que el campeón fue el Valencia, el mejor equipo de España en ese momento. Valencia venció en la final al Olympique de Marsella, que tenía a Didier Drogba como su referente ofensivo.