Goleador histórico con San Martín, Jorge Crovetto fue cultivando su amor por el hockey allí, el club donde también, hizo sus primeros pasos como entrenador. Campeón con el seleccionado de Buenos Aires este año, hace cuatro temporadas que Quilmes bajo su mando está en ascenso y lucha por llevarlo a pelear el Torneo Metropolitano de damas. Se define como "pasional" y analizó en charla con ESPN.com: "Ser DT es ser un poco psicólogo, ser un poco padre, ser un poco compañero. Saber cuándo es el momento para hablar con los jugadores y jugadoras. Es la conjunción de todo eso. Las personas que pueden generar ese vínculo de confianza, cuando se logra eso, se logran los resultados".
"Estamos en una generación del 'todo ya' y es difícil hacer entender que los procesos llevan su tiempo. Hay cosas que necesitan madurar. Tanto con experiencia, con aprendizaje, con caídas y derrotas. En mi proceso como entrenador fui más o menos igual. No soy el mismo que era en el 2008 cuando dirigí mi primer plantel superior, ni cuando a los 16 años entrenaba a la escuelita del club porque me gustaba", explicó el mandamás del cuerpo técnico del club quilmeño. Y sostuvo sobre su rol y cómo fue evolucionando con los años: "Me fui equivocando, fui corrigiendo, fui cambiando y escuchando gente que me fue guiando. Es importante aprender de los errores para no repetirlos y siempre estar dispuesto y abierto a que se van a cometer y que no sean los mismos de hace años sino que sean nuevos que me den aprendizaje".
Y consideró, que en este sentido, la colaboración entre los distintos entrenadores, es fundamental para el crecimiento actual del hockey. "El nivel de los entrenadores de Argentina y del Metro de la A y B es muy bueno. Entendimos que ayudándonos y colaborando crecemos todos. Crece el hockey y vamos hacia ese camino. Nos compartimos videos, tenemos un grupo de Whatsapp y tenemos mucha comunicación entre nosotros. Es bueno que así sea", contó.
Jorgito es parte de una camada de directores técnicos que van al detalle partido a partido y se hace notar por el creciente nivel del juego, tanto en la rama masculina como la femenina. Sin embargo, no olvida una parte esencial del deporte del palo y bocha: el amateurismo. "Ellos hacen esto por diversión y más allá de los objetivos que uno busca, y que uno trata de exigirlos al máximo, el primer objetivo es que la vengan a pasar bien en el club y en el entrenamiento", enfatizó. Y sumó: "Por lo general decido por lo que me dicta mi instinto. Me muevo mucho por mis emociones. Trato de ponerme en el lugar de los jugadores y jugadoras y hacerles entender que se pongan en el lugar del compañero o compañera que compiten para que entiendan las decisiones que después uno toma".
Quilmes y San Martín se han vuelto parte esencial de la vida detrás de la línea de cal para Crovetto. Con el Cervecero ha marcado un camino que está en una curva ascendente. "Hace cuatro años cuando llegué nos propusimos poner al club en la A. Hacía 10 años que jugaba en la B y lejos de esa posibilidad. Nuestro segundo objetivo era que vuelva a ser protagonista del Metro en Primera División. Y se fue dando todo. El campeonato pasado llegamos al Top 8 y este año al Top 10. Tenemos equipo para estar en ese lugar", comentó. Y añadió: "Dejamos pasar puntos importantes para tener chances de jugar un playoff. Aunque, mientras tengamos chances matemáticas vamos a seguir dejando todo cada fin de semana para intentar llegar a ese lugar".
Sobre el Tricolor, palabra autorizada indudablemente, reparó sobre las distintas realidades que viven el combinado femenino y el masculino. "Después de una primera rueda difícil para las mujeres, en esta parte de la Reubicación están compitiendo y hay chances de jugar el Metro A el año que viene. Es un equipo joven que le costó sostener el ritmo tal vez", opinó. Y, sobre los varones, dijo: "Se les viene un momento de recambio de jugadores. Se viene trabajando muy bien en las Inferiores y eso se está viendo. Hay dos chicos en el sub-19 y uno en el sub-16. Las tiras están completas y creo que se vienen muy buenos años por delante".
El palmarés de Jorge Crovetto le permitiría soñar a cualquiera con metas y deseos importantes. Pero, es él, quien con los pies en la tierra definió cómo se ve en su futuro cercano. "Me veo dirigiendo de acá a unos años tanto en varones como mujeres. Sería necio no soñar con el seleccionado nacional, incluso como colaborador, pero, hay que bancar y respetar los procesos actuales. Si se da fantástico y si no se da, seguiré disfrutando del proceso y ser feliz con lo que me gusta hacer", concluyó.