Luciana Aymar es sinónimo de hockey, no solo argentino si no que también mundial. La mejor jugadora de la historia, parte de inmensos logros con Las Leonas como la primera medalla olímpica en Sídney 2000, estuvo presente en una tarde-noche muy especial para el hockey argentino con la reinauguración de la cancha "Soledad García" en el Polo Deportivo Mario Alberto Kempes. En una nota mano a mano con ESPN.com, Lucha se refirió a lo que significa haber acompañado a su amiga en dicho momento y también recordó los Juegos Olímpicos de Sídney.
"Lindo poder haber venido. Al principio le había dicho que no, porque tenía un compromiso laboral en Buenos Aires, pero hice todo lo más rápido que pude para lograr tomarme el avión y estar acá. Sé lo importante que es para ella este evento en particular, la reinauguración de la cancha, y para mi también, porque yo compartí con Sole hermosos momentos", comenzó la rosarina. Y agregó: "Convivimos muchos años juntas en el CeNARD, nos hemos contenido en muchos momentos que lo hemos necesitado y tenemos muchas anécdotas juntas. Tenía la necesidad de compartir este momento con ella. Me encanta ver su foto en la puerta del estadio, lo que la gente la quiere porque ella es un emblema para el deporte argentino. Me parece que esto le hace re bien al hockey cordobés y también al argentino, porque se sigue expresando este cariño y alabando a las jugadoras de la selección que tanto le han dado al hockey".
"Con Sole éramos de las más pequeñas. Nuestra cábala era que yo siempre la peinaba y le hacía las típicas trenzas para entrar a jugar. Eso creo que me ayudaba mucho a mi a concentrarme en el partido, era nuestro momento y todo el mundo sabía que nadie nos tenía que molestar, que yo la tenía que peinar", declaró entre risas sobre anécdotas junto a Sole en Sídney 2000. Y luego prosiguió: "Cada vez que me tocaba dormir con Sole era un placer porque nos acompañábamos un montón, imaginate que dormíamos todo el tiempo juntas en el CeNARD. Eso sí, Sole a la noche hablaba dormida y muchas veces cantaba canciones de Argentina dormida o decía ´tenemos que acomodar ese cuadro´ y yo le decía ´¿qué cuadro, Sole?´. Entonces la volvía a dormir, le decía que tenía que descansar que mañana jugábamos. Encima a mi me costaba dormir y una vez que reconciliaba el sueño aparecía la "Gorda" cantando canciones de Argentina y yo no daba más jajaja. Pero bueno, tengo anécdotas muy lindas con ella e íbamos de un lado para otro juntas".
"Si tuviera que elegir un momento con Sole García sería el Mundial 2010, que fueron cosas muy fuertes las que vivimos. Teníamos una química tan fuerte adentro de la cancha, creo que nunca estuve con una jugadora con la cual sabía lo que iba a hacer a la perfección con la pelota, los movimientos que hacía y dónde se la tenía que pasar como con ella. Yo siempre la buscaba, por ahí corrían otras jugadoras como Mechi (Margalot) pidiéndome la bocha y yo ni bola, se la pasaba a Sole, obvio. Mechi me decía ´Lucha, pasamela que estoy sola´ y yo pensaba por más que esté sola y Sole esté con cinco jugadoras, yo se la iba a pasar a Sole jajaja".
Ya yendo un poco más hacia el tema del 25° aniversario de Sídney 2000, Aymar habló acerca de si son conscientes de lo que generaron desde aquel JJ.OO. hasta la actualidad: "Yo creo que ninguna de las 16 jugadoras y el cuerpo técnico es realmente consciente del todo de lo que se logró con el hockey. Comencé a valorar mucho más mi carrera y la revolución del hockey argentino con Las Leonas una vez que me retiré. Cuando vos estás adentro, estás todo el tiempo con un propósito y un torneo nuevo, entonces no sos consciente de lo que vas provocando. Hoy soy una agradecida de todo lo que pude jugar, de lo que pudimos lograr con la Selección Argentina y en mi carrera personal, porque fue una pelea conmigo misma también. El hockey me generó una gran personalidad".
"Hace 25 años, Lucha era muy rebelde en el juego, jugaba titular pero las responsabilidades las tenían las más grandes, entonces yo recién tomando cierto protagonismo. Cacho (Vigil) me decía ´Lucha, deja de hacer tantos garabatos en la cancha, es para adelante que tenés que ir´. Claro, yo pasaba a una, volvía, la pasaba de nuevo, iba para atrás jajaja. Era mi estilo de juego y a medida que pasaban los años fui aprendiendo un montón con estos grandes entrenadores que tuve. Cambié mucho mi estilo de juego, forjé una personalidad más estructurada, era una persona más resiliente, con esfuerzo y dedicación, y eso me lo dio el seleccionado. Desde la Lucha de Sídney 2000 hasta la Lucha que dejó de jugar, son dos jugadoras totalmente distintas", cerró Luciana Aymar sobre su camino en la Selección Argentina, con una anécdota de por medio con Sergio "Cacho" Vigil y una explicación de cómo fue evolucionando como jugadora.
El 29 de septiembre del 2000, Las Leonas consiguieron un logro que será recordado para toda la vida y comenzó una época dorada que hasta el día de hoy continúa. Tan grande fue lo que se consiguió en Sídney, que hoy una jugadora como Soledad García es reconocida con su nombre en una cancha de su provincia y es acompañada por Luciana Aymar, su amiga y la mejor jugadora de la historia del hockey.
