La atleta dominicana llegó al atletismo por puro azar de la vida, buscando ayudar a su familia, y se ha convertido en una atleta de proporciones históricas para su país.
Marileidy Paulino nunca ha negado ni ocultado sus humildes orígenes. Nacida en Don Gregorio, un municipio de la provincia Peravia, a aproximadamente una hora de la capital de República Dominicana, la velocista dominicana empezó su carrera en los deportes para ayudar a su familia a salir de su situación y lo hizo a través de las fuerzas militares del país.
Si Don Gregorio les suena familiar, es porque de esa localidad es oriundo el miembro del Salón de la Fama de Cooperstown, Vladimir Guerrero Sr.
“En Nizao todos somos Paulino, Guerrero o Valdez”, dijo Paulino, en tono de broma, a ESPN en 2021.
Desde entonces, Paulino ha ganado tres medallas olímpicas, incluida una de oro en los 400 metros planos en París 2024, convirtiéndose en la primera mujer dominicana que consigue una presea dorada en un certamen olímpico y a la vez, en la máxima ganadora de medallas de Juegos Olímpicos para el país con tres.
Sin embargo, las cosas no fueron sencillas para la dominicana. Paulino ni siquiera tenía el atletismo como primera opción, viniendo de la pobreza extrema.
“Todo lo logrado ha sido producto de muchísimo esfuerzo. En mi casa no teníamos mucho que comer, así que ingresé a la Fuerza Aérea de República Dominicana para asegurar un salario mensual y me uní a su cuerpo de atletas”, señaló a EFE la atleta antes de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Paulino, quien hoy es segunda teniente en la institución militar, dijo a ESPN, días antes de llegar a Tokio, que lo que la ha mantenido obtenido sus metas es su fe en Dios y su enfoque.
Paulino ha contado en múltiples ocasiones las historias sobre cómo iba a competencias o entrenamientos sin tener dinero para siquiera poder comer y cómo eso fue forjando su carácter, su personalidad, pero sobre todo su fe. Lo más curioso de la historia de Paulino en el deporte, es que hace aproximadamente diez años la historia pudo haber sido diferente. Marileidy se pudo haber convertido en una estrella del balonmano e incluso quien sabe si pudiera haber sido una de “Las Reinas del Caribe”.
En su escuela Alirio Paulino de su tierra natal, su profesor de educación física notó sus habilidades cuando en salto superaba con creces a todos y a todas de su nivel.
“Mi profesor vio mis aptitudes e hizo algunos contactos. Comencé a jugar balonmano y voleibol, pero tuvo que dejar este último hacía los saques con demasiada fuerza y la pelota siempre se iba lejos y fuera”, indicó Paulino.
Para 2015, aproximadamente, comenzó con el atletismo y dejó a un lado el balonmano, donde estuvo a punto de hacer la Selección Nacional Dominicana, y a casi diez años de esa decisión, todo apunta a que fue acertada.
Hoy, Marileidy Paulino es la corredora número 1 del mundo en su categoría, es una tres veces medallista olímpica y hoy por hoy, es la mejor atleta dominicana. Sin embargo, la corredora no se ve a sí misma como tal cosa y tras la carrera, lo único que dijo es que espera ser inspiración para que los jóvenes se acerquen al deporte.
MARILEIDY PAULINO BREAKS THE WOMEN'S 400M OLYMPIC RECORD 🥇
— ESPN (@espn) August 9, 2024
She's the first woman from the Dominican Republic to win an Olympic gold medal 🇩🇴 pic.twitter.com/lKgPUeSZST
“(Competir) Lo hago para que más jóvenes salgan adelante, porque este logro no es un simple logro, esto es una puerta que se le abre a los jóvenes dominicanos. Me hace sentir muy feliz que muchas niñas hoy en día se estén refugiando en el deporte. No es solo salir de la pobreza, sino salir hacia adelante”, dijo Paulino al ser cuestionada por los medios de comunicación sobre cómo espera que vean el resultado de su esfuerzo.
En cuanto a un posible legado, Paulino tiene claro qué quiere dejarle a su país. “Diría que quisiera que mi legado sea que tuvo una fe gigante para poder llegar a realizar sus sueños, quiero que se quede eso”, le dijo al periodista Yancen Pujols el año pasado.