Después de haber alcanzado la gloria olímpica en los Juegos Olímpicos de París 2024, Daniel Pintado arribó a su adorada ciudad de Cuenca, en la que tuvo ese maravilloso reencuentro con sus familiares, además de ser recibido por un buen grupo de personas.
El atleta hace 24 estuvo en Guayaquil, compartiendo un momento con los medios de comunicación y teniendo una cena con los integrantes del Comité Olímpico Ecuatoriano. Ya en su ciudad natal, el ecuatoriano tuvo un gesto memorable, justo al ver a su señora madre, le entregó la histórica medalla de oro que consiguió en la categoría 20 kilómetro de marcha masculina.
Otro momento destacable, fue que al bajar del avión, Pintado tuvo ese abrazo eufórico con sus hijos, quienes son su motor e inspiración de cada meta conquistada en este camino deportivo.
El marchista tuvo unas palabras de agradecimiento: "Agradezco a Dios por haberme dado la oportunidad de nacer en Cuenca, la ciudad más bonita del mundo. De permitirme cumplir mi sueño con mi padre y con mi madre en vida. También por tener a los hijos más hermosos, que han sido el motor principal de mi carrera. Y tampoco quiero olvidarme de toda mi familia y de mi equipo trabajo, que son fundamentales".
Después comenzó la caravana por toda las Atenas del Ecuador, en donde varios compatriotas pudieron ver a su doble medallista olímpico, que dejó muy en alto la bandera tricolor en los recientes Juegos Olímpicos.
Daniel Pintado celebró con su gente la medalla de oro por los 20 km de marcha, y la presea de plata por los relevos mixtos con Glenda Morejón.