El refuerzo procedente del América ha incrementado su nivel conforme avanza el torneo olímpico
Henry Martín, uno de los refuerzos de la Selección Mexicana Olímpica, reveló que jugó con dolor ante Corea del Sur, incluso informó que no se quiso infiltrar contra los asiáticos. Ahora, ante Brasil en semifinales, asegura que no tiene miedo, pues solo le da temor su mamá.
"Miedo a nadie. Miedo a mi mamá nada más...", declaró el atacante del Tri, quien aclaró que no jugó infiltrado y se aguantó el dolor durante el partido de los cuartos de final. "Si me hubieran infiltrado algo no hubiera jugado. Me aguante el dolor así".
"Quería, a eso vine a jugar y un golpe no me iba a dejar fuera, fue más el querer y buscar la medalla y lo logramos. Estamos a un paso. Por supuesto y lo más importante es que cualquiera meta gol. Eso es muy difícil y nosotros lo tenemos, a quién vas a marcar eso es bueno para el equipo".
Por otro lado, Guillermo Ochoa aseguró que a pesar de que la Selección Mexicana hizo seis anotaciones, Corea del Sur fue un rival complicado, pero la contundencia hizo que el trámite del cotejo fuera más sencillo.
"No fue un rival fácil, fue un rival difícil. La contundencia lo hace ver los partidos de otra forma. Hoy tuvimos esa fortuna en la portería. Nos apretaron mucho y no afloraron. No hubo rival sencillo y en esa tapa de continuar y no bajar los brazos".
"Huele la medalla a ilusión a sueño a eso venimos para estar en el último día. No es fácil un torneo con tantas selecciones. Es un torneo extraordinario y queremos coronarlo con una medalla".
Ochoa reiteró sobre la calidad del conjunto brasileño, quien llega a las semifinales tras vencer 1-0 a Egipto en los cuartos de final.
"Va a ser un partido difícil contra Brasil. Siempre son ellos los candidatos, vamos a competirlo y veremos qué pasa".