El atleta guatemalteco quedó entre los mejores cuatro badmintonistas de los Juegos Olímpicos de Tokio
CIUDAD DE GUATEMALA -- Superando las expectativas de sus presentaciones anteriores, el zacapaneco Kevin Haroldo Cordón Buezo, se ubicó como el cuarto mejor badmintonista de los Juegos Olímpicos de Tokio, llegando a pelear la medalla de bronce ante el indonesio Anthony Ginting, donde cayó por marcador de 2-0 con parciales de 21-11 y 21-13 en la cancha de Musashino Forest Plaza.
En entrevista con ESPN Digital, el entrenador José María Solís se refirió a la presentación de Kevin Cordón en la cita olímpica a sus 34 años como único latinoamericano en pelear medalla.
“Me siento complacido como entrenador de Kevin porque siempre he estado velando a la par de él para que logre sus objetivos poco a poco. En esta ocasión, nos sorprendió a todos porque realmente demostró un nivel muy alto. Lamentablemente acá en Guatemala no contamos con demasiado sparring y al final eso puede ser un factor que frene el desarrollo de un atleta”, manifestó Solís.
Ubicando en el ranking 59 de la Federación Mundial de Bádminton con 454 victorias en su carrera, Kevin Cordón cumplió su cuarta participación en Juegos Olímpicos (Beijing 2008, Londres 2012, Rio 2016 y Tokio 2020), alcanzando una histórica presentación para América Latina.
“Kevin no puso ningún pretexto. Se trabajó con todo el ímpetu, concentrado y buscando el objetivo. Hoy podemos decir que ahí está el resultado con un cuarto lugar histórico para el bádminton de Guatemala y América Latina. En Londres logramos avanzar a la llave de 16. El pronóstico para Tokio 2020 era que él iba a llegar a ronda de 16, ganando su grupo y superó por completo el pronostico que teníamos”, agregó José María Solís.
🇬🇹🏸 El zacapaneco logra una actuación histórica en los Juegos Olímpicos de #Tokyo2020
— ESPN Guatemala (@ESPN_GT) August 2, 2021
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Durante su preparación para la justa olímpica, Kevin Cordón también contó con el apoyo de Muamar Qadafi, entrenador indonesio que lo acompañó en los entrenamientos realizados en el salón parroquial de La Unión, Zacapa, durante la pandemia.
“Afortunadamente contamos con la ayuda del entrenador Muamar Qadafi de Indonesia que estuvo trabajando con nosotros. Con él se planificada en base a fortalecer las cualidades de Kevin en el ataque porque es un jugador muy explosivo, pero se tenían que mejorar otros aspectos con paciencia y dedicación que finalmente dio resultado. Kevin llegó a los Juegos Olímpicos como un jugador más completo porque logró combinar muchos de esos factores para aplicarlos a la táctica”.
Por último, José María Solís se refirió a la mentalidad que mantuvo Kevin Cordón de disfrutar cada juego, sin presionarse por el rival a enfrentar. “Ningún atleta va un evento con la intención de fracasar, los atletas profesionales van para ganar y eso ya depende de otros factores. En el caso de Kevin, disfrutó todos los partidos, se soltó y jugó sin preocupación y miedo al fracaso. Eso fue clave para poder obtener estos resultados”.