NÁPOLES (EFE) -- Diego Armando Maradona, que está en Nápoles para asistir al partido del adiós al juventino Ciro Ferrara, su gran amigo y ex-compañero en el equipo napolitano, saludó y dio un abrazo a Corrado Ferlaino, ex-propietario del club y al que varias veces acusó como causante de sus males en Italia.
Maradona, que llegó acompañado de su hija menor, Gianina, y su ex-mujer Claudia Villafane, se encontró brevemente con Ferlaino en el restaurante del hotel donde se aloja el "Pibe de Oro".
El encuentro ocurrió mientras Maradona estaba almorzando con su gran amigo Salvatore Bagni, ex-compañero y su consejero en Italia, y, tras una serie de conversaciones telefónicas, Ferlaino acudió al restaurante acompañado del administrador delegado de la empresa que organizó el partido homenaje a Ciro Ferrara.
Maradona y Ferlaino se estrecharon las manos y se dieron un abrazo. Después, el ex-propietario y ex-presidente del Nápoles se entretuvo hablando unos minutos con el astro argentino y con otros de los ex-jugadores presentes en la sala.
Ferlaino fue el propietario y presidente que llevó a Maradona al Nápoles. Con ambos, el club napolitano obtuvo dos títulos ligueros (1987 y 1990), 1 Supercopa Italiana (1990) y 1 Copa de la UEFA (1989).
Pero, luego, la relación entre Ferlaino y Maradona se rompió totalmente en 1990, con acusaciones cruzadas entre las partes, tras la marcha del jugador en 1991 de la entidad napolitana.