Nueva derrota y nueva despedida para el tenista francés Richard Gasquet (128°), que este martes no logró aprovechar el wild card otorgado por la organización del ATP 250 de Marsella al caer 6-4 y 6-4 frente al kazajo Alexander Bublik (48°) en primera ronda.
Luego de anunciar la fecha de su retiro en octubre pasado, el ex número 7 del mundo, quien colgará definitivamente la raqueta en la próxima edición de Roland Garros, no ha firmado la mejor de las rachas en el máximo nivel, registrando cinco derrotas y tan solo dos triunfos en cuadros principales, así como tres intentos frustrados en etapas clasificatorias.
No obstante, el dueño de 16 títulos en el circuito, el cual participó en 15 ediciones en el evento de su país, alcanzando semifinales en 2014 y 2017, aprovechó la conferencia de prensa para sumarse a una queja generalizada de varios jugadores en el último tiempo como las características de las pelotas implementadas.
"Desde el COVID ha sido catastrófico. Son tan pesadas que puedes golpearlas y no saldrán de la cancha. Realmente está cambiando el tenis, hay menos creatividad", expresó el nacido en Beziers, de 38 años, el cual en enero de 2024 abandonó el Top 100 del ranking mundial por primera vez desde 2005.
De esta manera, el medallista bronceado en dobles en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 se une al reclamo del español Carlos Alcaraz (3°), quien hace solo unos días, después de superar su estreno en el ATP 500 de Rotterdam , había puesto el grito en el cielo: "Nuevas pelotas, todo parece moverse muy rápido. Después de dos o tres intercambios la pelota viene muy pesada y es un poco complicado jugar agresivamente".
"Creo que el año pasado hubo muchas lesiones, muchos jugadores con problemas en los codos o los hombros. Algo tiene que cambiar. Todas las semanas, prácticamente todas las semanas, tenemos pelotas y condiciones diferentes, es difícil adaptarse", había extendido el joven murciano, que ahora juntó una opinión relevante para que la ATP tome cartas en el asunto.