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¿Y si la NBA no va para adelante?

Será el miércoles cuando sepamos si la NBA se reanuda o no. Si la burbuja de Orlando y sus protocolos, alertas de proximidad, anillos inteligentes para medir temperatura, ritmo cardiaco y propensión a contraer COVID serán puestos a prueba para reanudar la primera de las ligas deportivas importantes en los Estados Unidos.

Los jugadores tienen hasta el día 24 de junio para decidir si viajan o no la Florida, ese día será cuando reciban los resultados de sus pruebas y la NBA valorará con el número de positivos si el plan burbuja sigue o no.

Pero el gran problema se agrava cuando este sábado Florida reportó una cifra récord de positivos por coronavirus con más de 4 mil casos reportados en 24 horas. Hace dos meses la gente que viajaba de Nueva York a Florida era puesta en cuarentena ahora la relación se ha invertido.

El momento de decidir se acerca y esa decisión tendrá un impacto significativo en lo que ocurra con el resto de las ligas grandes en Estados Unidos, porque si la NBA no va para adelante difícilmente lo harán las demás.

Apenas el jueves el Dr. Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Contagiosas en EU declaró que ve muy complicado el regreso de la NFL en su formato tradicional y que deberían de pensar en una burbuja como la que propone la Asociación de Basketball. Sin embargo, si ya resulta complicado encapsular por 3 meses una liga de basketball con 37 personas por equipo incluyendo staff, una liga que además se reducirá a 16 equipos en un mes, es impensable que la NFL pudiera hacerlo con rosters de más de 50 jugadores por 5 meses.

La NHL y la MLS reaccionarían en consecuencia a lo decidido por la NBA, la MLB aunado a esta problemática enfrenta una negociación colectiva que dista de encontrar un acuerdo y la NFL mientras tanto espera que algo pase en el camino para que su temporada no se vea afectada.

Con el reloj encima, la presión de patrocinadores, firmas de contratos de televisión y una contingencia que no cede, el miércoles puede ser el día más importante en mucho tiempo para el deporte en los Estados Unidos.