MIAMI -- 1. SE FUE OTRO FAVORITO y van dos. Puerto Rico cayó en un emocionante encuentro ante un equipo de México que no tiene mucha prensa como su hermano mayor del Tri futbolero, pero que sí es capaz de llegar y ganar un quinto partido en la competencia más importante y glamurosa del béisbol. Todos hablan y escriben de lo bien que jugó el Team Rubio en la competencia. Cierto. De hecho, tras buscar en redes sociales no encontré ningún meme, salvo los procedentes de fanáticos de República Dominicana; más bien, todas las publicaciones son loas al desempeño del equipo que no puede repetir los segundos lugares alcanzados en las ediciones de 2013 y 2017. Sin embargo, oficiaré como rosca izquierda, contracorriente, porque de verdad me tiene desconcertado cómo algunos peloteros profesionales son incapaces de ejecutar los fundamentos del béisbol, dígase el ABC, eso que aprendemos cuando niños.
2. NO SÉ SI LO HACEN por ego o jugarse hoy en día una pelota cuadrada donde casi todo sobra, lo único importante y que te garantizará más billete es levantar la bola para dar jonrones. Así lo exige la sabermetría y así hay que hacerlo. De la pelota de antes queda poco o nada. Pero en los encuentros de eliminación, la cuadratura puede pasarte factura. Y eso le pasó a Puerto Rico. No aprovechó una brecha inmensa y firmó su carta de defunción. Cada día son menos los que se dan cuenta de esos deslices que cuestan juegos de temporada regular, playoffs y fases de muerte súbita en el Clásico Mundial. Voy al punto. Octava entrada, corredores en tercera y primera y dos outs. El hombre en la antesala (MJ Meléndez) significa el empate. México opta por usar el shift defensivo. Deja al tercera base jugando corto, pero en franca posición del torpedero. Sin preocupación, Meléndez adelantaba hasta mitad de camino del plato en correspondencia a la lejanía del antesalista. En la caja de bateo, Eddie Rosario, un bateador habilidoso, de contacto, que había conectado jonrón en el primer capítulo.
3. EN LA 'PREHISTORIA' del juego -hace 30 años--, un pelotero de las características de Rosario, --138 cuadrangulares en 8 temporadas (17.5 de promedio)--, hubiera tocado la bola hacia la raya de tercera para embasarse. El corredor hubiera anotado tranquilamente. Rosario no lo hizo y falló con elevado de foul al receptor. Luego, llegó el noveno y el mánager Yadier Molina decidió tocar la bola, jugada que creo correcta, pero que no entiendo por qué la usó en el noveno y no apostó por ella en el octavo con un espacio enorme para colocar la pelota. Un ex jugador tan agudo como Yadi debió notar ese regalo de la defensa mexicana. No lo hizo y eso le costó la eliminación. Humildad, si un tal Shohei Ohtani es capaz de tocar la bola para embasarse, cómo el resto de los mortales no va a saber hacerlo o ¿acaso su ego no se los permite?
Shohei Ohtani no es de este planeta. No sólo lanza 100 MPH, da 40 jonrones en una temporada de Grandes Ligas, también es capaz de hacer esto. ¿Cuál es el límite? Sólo él lo sabe#worldbaseballclassic #ClasicoMundial #WBC2023 #WorldBaseballClassic2023 pic.twitter.com/GF9mwGhmr4
— Robiel Vega (@robielvega) March 16, 2023
4. DIJO BENJI GIL, mánager de México, que un equipo de su país nunca había avanzado en un torneo mundial con los mejores exponentes del deporte. Ésta es la primera vez y extraoficialmente me comentaron que no hay más de una decena de periodista de México siguiendo a la selección de béisbol para cubrirlo. No pretendo sermonear a nadie ni tampoco pedirles que cambien de prioridades, aunque los resultados son evidentes desde hace mucho tiempo, el béisbol en México merece un espaldarazo. Merece, simplemente, algo más.
5. RANDY AROZARENA ha puesto la vara muy alta durante este Clásico Mundial para los atletas naturalizados en México. Desde el rendimiento, por mucho el de mejor desempeño, hasta su carisma para ganarse a la gente y convertirse en líder de un equipo que no le pertenecía por nacimiento, pero que sí es suyo por convicción. Randy ya es un wey más, probablemente, uno esos que comen con mucho picante y gritan ¡Viva México, cabro...! Ya Benji Gil le llamó el Chavo del 8, no hay una adaptación más fluida... Funes Mori, ve tomando nota.
6. ASÍ DEFINIÓ Gil a Arozarena después de la atrapada magistral que él asegura es la jugada más grande de los deportes colectivos en México. "No sé si ahora es más grande que el Chavo, o todos los personajes. Es todos los personajes principales del México de hoy. Ese tipo está dedicado, dedicado a hacer todo lo que esté a su alcance para ayudar a esta familia de guerreros mexicanos a luchar por el campeonato".
7. EL BÉISBOL no es patrimonio exclusivo de Estados Unidos. Está bien, inventaron el juego, pero a la misma vez lo tienen secuestrado. No me malinterpreten, no son todos, pero algunos creen que el Clásico es una pérdida de tiempo y solo Rob Manfred y MLB lo impulsan porque "es una buena manera de vender uniformes". Nada más alejado de la verdad, al menos, de la mía. Solo hay que chequear los números de esta quinta edición del WBC donde se han roto muchos récords. Pero no seamos materialistas, seamos sensatos. El béisbol es una industria multimillonaria que se está poniendo vieja y lucha -miren los cambios de reglas- para sobrevivir en una era donde todo es tan fugaz y no son mayoría los que están dispuestos a dispararse un juego, por momentos monótono, por tres o cuatro horas.
8. LOS JÓVENES probablemente prefieren la NFL y NBA. Si el béisbol quiere salvarse a largo plazo deberá internacionalizarse. Y el Clásico es la mejor manera de hacerlo. Ir en contra no hace más que lastimar el poder del béisbol. Nadie quiere lesionarse, ni desea atravesar el momento por el que pasó Edwin Díaz. Tampoco que los dueños pierdan inversiones millonarias. Pero, a veces, perdiendo se gana. Y es probable que la sola presencia de Edwin en los New York Mets, y toda esa aureola que le rodea en Queens con el estruendo de las trompetas, sea la inspiración de cientos y hasta miles de chicos boricuas que algún día se sentirán identificados con ellos. Uno nunca sabe.
9. ESTADOS UNIDOS no tiene oportunidad en el Clásico, dijo un periodista estadounidense que prefiero no nombrar porque su frase salió en una conversación informal. Pero, como estaba muy buena, quise compartirla contigo. "Estados Unidos es una colección de estrellas, pero no es un equipo. No tiene nada que hacer contra el resto de los participantes en esta fase. Ellos puede que no tengan las figuras, pero sí son un equipo. Estados Unidos es un grupo de multimillonarios juntos". ¿Qué opinas?