NEW YORK – Los Houston Astros tienen agonizantes de los Bombarderos del Bronx y están a un paso de llegar a su segunda Serie Mundial en tres temporadas.
Este jueves, comenzaron poco a poco y al final noquearon a los New York Yankees 8-3 para poner la Serie de Campeonato de la Liga Americana 3-1 en el Yankee Stadium.
Los Astros saben que sus posibilidades de avanzar en esta serie subieron arriba del 80 por ciento.
"Estamos contentos por este juego pero aún nos queda uno", dijo el relevista mexicano Roberto Osuna. "No nos podemos descuidar. Es un excelente equipo el que está del otro lado y vamos a tratar de finalizar esto mañana. Obviamente, tenemos que seguir jugando bien".
Los Astros aprovecharon en este Juego 4 que salieron sin daños mayores de una primera entrada que pintaba mal para ellos, cuando su pitcher abridor Zack Greinke comenzó el partido con dos bases por bolas consecutivas y finalizó la entrada con una carrera de 'caballito'; la única que anotaron los Yankees, junto a las dos que impulsó el jonrón de Gary Sánchez en la sexta entrada.
A partir de ahí Grenke se compuso y su rival, Masahito Tanaka, empezó a ir a menos.
"Zack hizo un excelente trabajo", consideró Osuna. "Batalló y batalló. La alineación de los Yankees es demasiado buena. Pero nos dio casi cinco innings, que fueron muy buenos para el bullpen".
Greinke (1-0) se fue después de cuatro entradas y un tercio, en las que permitió sólo tres imparables y una carrera. Ponchó a cinco de los 13 Yankees que se fueron por esa vía esta noche.
Tanaka (1-1) fue castigado en la tercera entrada por el cuadrangular de tres carreras de Springer, en la tercera entrada, que fue una inyección de adrenalina pura para los Astros, que a partir de ahí, ya jamás voltearon para atrás.
"Por supuesto que en ese momento te cambia el partido y el ánimo por completo", mencionó el primera base de los Astros, Yuli Gurriel. "Ahí empiezas a ver que su abridor no es intocable. Nos lanzó un muy buen partido en Houston. Pero hasta ahí…".
Después en la sexta, Carlos Correa prácticamente puso el último clavo en el ataúd, con jonrón de tres carreras que dejaba el partido 6-3 y a los Yankees desahuciados.
Fue apenas el tercer imparable de Correa en la serie y el segundo jonrón. Además fue la sexta vez que pega vuelacercas en el mismo juego de playoffs que George Springer para convertirse en la pareja de compañeros de equipos con la mayor cantidad en la historia de las Grandes Ligas.
"Es importante que ellos respondan con el bate", consideró Osuna. "Eso es lo bueno de este equipo, que siempre juega duro y aunque las cosas no salgan seguimos jugando fuerte hasta que se den".
Los Yankees ya jamás se repusieron. Igual que en la primera entrada, empezaron a dejar corredores en las bases y sobre todo en posición de anotar, sin que llegara el batazo oportuno.
Para colmo, comenzaron a sumar errores. Las cuatro pifias que cometieron este jueves fueron su mayor cantidad en postemporada desde 1976.
"Jugamos pobre esta noche", reconoció el manager de los Yankees, Aaron Boone. "No hay otra manera de explicarlo. Necesitamos sacarnos esto de encima de inmediato porque necesitamos apurarnos y venir con nuestro mejor pie mañana (viernes)".
"Muchas cosas raras pasaron", agregó. "Y necesitamos jugar un partido más limpio, obviamente, si vamos a vencer a un equipo como ese. Hoy no cumplimos con el trabajo".
Los Astros tratarán de finiquitar su boleto al Clásico de Otoño con Justin Verlander en la loma, quien enfrentará a James Paxton, de los Yankees.
"Ellos son extremadamente talentosos y tiene un gran acercamiento del juego", dijo Verlander un par de horas antes del Juego 4. "Del 1 al 9 en su alineación pueden lastimarte. Si cometes errores vas a ser castigado. Sé que habrá momentos en que tendré hacer pitcheadas, porque no puedes controlarlos sólo con velocidad. A veces habrá que bajar la velocidad y ejecutar lo mejor que pueda".