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Estadio Teodoro Mariscal, ¿en medio de lucha de poder?

Cortesía

MAZATLÁN -- Los rumores, dimes y diretes, no han faltado tras la construcción del nuevo Estadio Teodoro Mariscal, que en este momento no tiene equipo de Liga Mexicana del Pacífico, ya que su concesión le fue retirada hace un mes a los Venados de Mazatlán en medio de una polémica en plena pandemia del coronavirus.

Desde que se iniciaron los trabajos de remodelación, que realmente fue una construcción nueva, se ha dicho que el Municipio de Mazatlán quiere pagar con el inmueble una demanda perdida ante una empresa, cuyos dueños no pudieron negociar compra de Venados en LMP hace unos años y tienen equipo en verano en LMB.

Sus nombres, José Juan Arellano Hernández y Erick Arellano Hernández, dueños de los Leones de Yucatán en la Liga Mexicana de Béisbol (verano) y expropietarios de los Algodoneros de Unión Laguna en la misma liga. Son las mismas personas que en 2015 buscaron comprar la franquicia de Venados de Mazatlán y la cual fue vendida a la familia Toledo, en ese tiempo encabezada por el exgobernador Antonio Toledo Corro, quien falleció en 2018.

Después de que se extendiera la concesión por 25 años más hasta 2045 --el 25 de septiembre de 2018 cuando aún restaban dos de la anterior-- tan solo dos meses antes de que la nueva administración empezara labores en noviembre de 2018, el alcalde Luis Guillermo Benítez Torres siempre se opuso a dicha ampliación del convenio.

Desde que tomó el poder y al perder el municipio una demanda cercana a los $300 millones de pesos ante la empresa Nafta del grupo corporativo Arhe --de los hermanos Arellano Hernández-- se rumoró que el presidente municipal propuso pagar deuda con el Estadio Teodoro Mariscal, de acuerdo con medios locales de opinión.

Se dice que los hermanos Arellano Hernández apoyan a Benítez Torres para que sea candidato a Gobernador de Sinaloa en las elecciones de 2021 y que desde que el municipio tomó las riendas del estadio hace un mes, Erick ha visitado el parque de béisbol.

Dimes y diretes, rumores, no pasa de allí, lo cierto es que en este momento Venados de Mazatlán no tiene estadio para iniciar temporada en octubre próximo, si la pandemia de coronavirus lo permite.

Y muy cierto, que los hermanos Arellano Hernández tienen las puertas cerradas de la Liga Mexicana del Pacífico desde que quisieron ofertar por los Venados en 2015, ya que los otros 9 equipos del circuito dan el total apoyo a la familia Toledo para que solucionen el problema de la concesión y todo vuelva a la normalidad.

“La LMP tiene conocimiento de todo lo que está pasando, y todos los equipos dan el apoyo a la familia Toledo”, dijo una fuente al respecto.

“No habrá otra franquicia en la ciudad que no sea Venados con la familia Toledo al frente, si otros piensan que la tendrán, no es así”, agregó la fuente.

Los rumores, dimes y diretes seguirán en el puerto mazatleco, y hay una pregunta que queda en el aire, ¿para qué quiere el estadio el Grupo Arhe, si no les otorgarán franquicia de béisbol invernal? ¿Acaso piensan en béisbol de LMB en Mazatlán? ¿Será el inicio de otra guerra LMB vs LMP como sucedió en los últimos años?

Junio será clave y para que la economía de Mazatlán repunte tras caerse con la pandemia, apuesto porque otorguen de nuevo el estadio a Venados.