Danny García debutó en el peso welter con una victoria esperada sobre Paulie Malignaggi, que no dejó nada nuevo, excepto muchas preguntas sin respuesta sobre su futuro desempeño en esta categoría. La batalla desarrollada en el Barclays Center de Nueva York era aguardada con una sola expectativa: comprobar si efectivamente la subida de peso mejoraba la actuación de García, quien había decepcionado en sus últimas peleas en las 140 libras. Esa expectativa, al menos en la noche sabatina, no fue satisfecha.
Es verdad que García lució más fuerte, pero también se vio más lento, demasiado estático y demasiado defensivo. Ante un rival sin pegada, que extrañamente no se movió por laterales como se presumía en lo previo ni tampoco le llegó con su golpeo, García no se mostró osado, no fue la única autoridad del ring ni tampoco consiguió establecer el ritmo de la pelea.
Fue una pelea anodina, por momentos aburrida y que no tuvo momentos de alto voltaje. Los porcentajes de golpes conectados, fueron ligeramente superiores para Danny García y ello demuestra a las claras que no hubo predominio marcado sobre quien dominó la pelea.
García sabía que ganaría con poco trabajo y no se esforzó. Por momentos trataba de poner presión y por momentos retrocedía y solo esperaba por un oponente que no se jugaba en el intercambio. Cuando Danny apuraba, lo hacía con golpes por afuera que en la mayoría de los casos no llegaban a destino. Paulie con un simple movimiento del torso, los evitaba. Y aun cuando García lograba conectar, sus golpes llegaban a destino a través de la palma de sus manos, nunca los nudillos.
En el séptimo asalto, Danny solo lanzó ocho golpes, mientras que en el octavo aceleró y castigó de manera muy dura la zona media de Malignaggi, que ya mpostraba cansancio y sus pocas ganas de seguir en la batalla. La misma finalizó a los 2.22 del noveno round cuando el referí decidió interrumpir y parar el pleito. Paulie hacía un buen rato que no lanzaba golpes.
Fue la última pelea de Malignaggi que ya anunció el final de su carrera. Una carrera que le dio más de lo que se podía esperar teniendo en cuenta su estilo y falta de pegada. A mi juicio, Paulie ha sido un fenómeno de sobrevivencia a contramano en la elite del boxeo, donde hasta fue campeón mundial en una muestra de que en este deporte hasta lo, presuntamente, imposible puede ocurrir. Quizás sus dotes de showman, su carisma payacesco, la verborragia incontenible y la capacidad de moverse por el cuadrilátero evitando ser golpeado, fueron los artífices de su éxito. Sea como fuere, la historia lo recordará como "aquél campeón que no parecía campeón".
Danny García, a su vez, no mostró nada, como lo señalamos al comienzo. Se vio lento, intermitente y por momentos hasta torpe en su accionar. Si tomamos como referencia el desempeño de esta batalla, su futuro en las 147 libras está en entredicho. No le alcanzará con el poder de su pegada en las dos manos, deberá mejorar en sus movimientos defensivos, tendrá que ganar velocidad en sus piernas, tendrá que trabajar en el enfoque agresivo, es decir, en su actitud. A García le falta mantenerse enfocado y eso, ante cualquiera de las figuras de la división puede ser fatal.
No sabemos aún a quien podrá enfrentar en su próxima pelea, pero candidatos no le faltarán. El establo de Al Haymon tiene muchos oponentes de nombre para Danny García (Shawn Porter, Adrien Broner, Keith Thurman, etc). No obstante, el ex doble campeón welter junior deberá ajustar su capacidad y encontrar el camino hacia el desempeño de sus primeras actuaciones. Las que lo llevaron al título y ser tomado en cuenta, en su momento, como miembro del selecto grupo de los mejores libra por libra del planeta.
Un tiempo que parece hoy lejano y que como en muchas carreras de campeones que pierden el rumbo, puede tener su origen en la influencia familiar. Tal vez, haya llegado el momento de hacer cambios en su esquina, tal vez habrá que preguntarse si a su padre como entrenador le queda algo para aportarle o por el contrario, es la gran razón de su mal desempeño.
Son preguntas sin respuesta y lo más preocupante, que esas preguntas sobre el futuro de Danny García nacen luego de una pelea que ganó por KOT y en el debut en una nueva división.