Junto a los de New York, Chicago, Berlín, Londres y Tokio, el Maratón de Boston integra el circuito de las 6 World Marathon Majors, los más prestigiosas del mundo, reconocidas por su trayectoria, convocatoria y calidad organizativa. Pero el de Boston ostenta un récord que ninguno puede igualar: es el más antiguo de los maratones que se corren cada año en todo el planeta.
De hecho, fue el primer maratón creado fuera de los Juegos Olímpicos y, desde entonces, no ha dejado de disputarse ningún año, salvo la excepción del 2020 en donde la pandemia del COVID-19 consiguió cancelarla por primera vez. Ni siquiera, durante las dos Guerras Mundiales había dejado de correrse el Maratón de Boston, cuya primera edición fue el 19 de abril de 1897, Día del Patriota, como símbolo de la lucha por la libertad de los estadounidenses. En aquel debut de la prueba 15 corredores partieron desde la línea inicial, recorrieron caminos de distintas localidades del Estado de Massachusetts y cruzaron la meta en Boston tras 39,4 Km. El ganador fue John J. McDermott, con una marca de 2:55:10. De allí en más, la prueba pasó a disputarse todos los años en esa misma fecha, con carácter local. Sin embargo, su fama fue creciendo y los corredores de otras ciudades y países comenzaron a llegar. Desde 1969, el Día del Patriota se celebra en Estados Unidos el tercer lunes de abril y, por tanto, el Maratón de Boston también.
Cuando años más tarde se estableció la distancia oficial del Maratón en 42,195 kilómetros, la salida se trasladó a Hopkinton Green en 1924 para adaptarse a estas nuevas reglas mundiales. La meta siempre se mantuvo en Copley Square, cerca del centro de la ciudad de Boston, justo frente al imponente edificio de la Biblioteca Pública local.
Otro dato curioso del evento es que durante casi toda su existencia no ha tenido premios económicos, y el ganador recibía únicamente una corona de olivo. Pero las cosas cambiaron en los años '80, cuando los premios en dinero en el maratón de Boston comenzaron a imponerse desde la edición 1986. En ese entonces los atletas profesionales empezaron a negarse a participar si no había premios económicos, por lo que la organización tuvo que adaptarse y buscar empresas que patrocinen la carrera y así cumplir con este requerimiento. Actualmente participan corredores profesionales y amateurs hasta sumar una media de 30.000 anuales, algo lejos de los 15 de 1897. Esto obliga a los organizadores a establecer límites en las inscripciones y a exigir estrictas marcas previas mínimas para aceptar a cada participante.
¿Conocías estas particularidades del Maratón de Boston?