El trail running es una opción cada vez más aceptada por los corredores, y al ser una modalidad diferente a las tradicionales carreras de calle también requiere de un entrenamiento puntual. Con esto nos referimos por ejemplo a sesiones específicas de fortalecimiento muscular, tendientes a darnos herramientas para afrontar los desniveles y para mitigar las lesiones cuando aumenta el kilometraje en las carreras de montaña. Esto se debe a que los corredores trail necesitan que sus músculos funcionen de manera eficiente en una variedad de terrenos, velocidades y distancias.
En líneas generales, una recomendación que hacen muchos entrenadores especializados en trail es que si vas a correr en la montaña hagas trabajos de fuerza al menos una vez por semana durante la temporada de carreras, y en meses en donde no hay competencias dos a tres sesiones de gimnasio por semana. En estos entrenamientos la idea es que te concentres en la construcción de músculos, de fuerza y el desarrollo de potencia, lo que te ayudará a ser más fuerte y más rápidos para correr en desniveles. Y un buen ejercicio para esto son los que activan la carga excéntrica y la estabilidad de las extremidades inferiores, como por ejemplo las estocadas con salto. Tampoco deberían faltar trabajos como las sentadillas, que fortalecerán todo tu tren inferior, especialmente tus cuádriceps que son los músculos más usados al correr en la montaña.
Recuerda siempre que correr por senderos puede ser impredecible, pero que tu cuerpo esté bien fortalecido te ayudará a tener éxito en este tipo de terrenos irregulares.
Y vos, ¿preferís el Trail running o las carreras tradicionales?