Correr con altas temperaturas puede ser un desafío, pero siguiendo algunos consejos puedes mantenerte seguro y cómodo mientras entrenas. Aquí te recordamos algunos consejos para que puedas disfrutar de tu carrera sin preocupaciones.
1. En primer lugar, planifica tu carrera por la mañana o al atardecer. Evita correr durante las horas más calientes del día, ya que el sol y la humedad pueden ser peligrosos para tu salud. Es mejor elegir un horario en el que el sol no esté en su punto más alto, ya que esto te ayudará a evitar golpes de calor y deshidratación.
2. Bebe suficiente agua: es fundamental mantenerse hidratado antes, durante y después de tu carrera. Asegúrate de beber suficiente agua antes de salir a correr, y lleva contigo una botella de agua o planifica paradas para rellenarla. Es importante recordar que cuando sientes sed, ya estás deshidratado.
3. Usa ropa fresca y transpirable: es importante elegir ropa hecha de materiales transpirables que te ayudarán a mantenerte fresco y seco. Esto te ayudará a evitar el sudor y el calor excesivo en tu cuerpo. Además, elige colores claros que reflejan la luz del sol.
4. Usa protectores solares: protege tu piel del sol con un protector solar de amplio espectro con un factor de protección solar (SPF) de al menos 30. Aplica el protector solar con al menos 20 minutos de anticipación antes de salir a correr para que se absorba completamente.
5. Escucha a tu cuerpo: es importante estar atento a cualquier señal de deshidratación o golpe de calor. Si te sientes mareado, cansado o con dificultad para respirar, detente y busca sombra o aire acondicionado. Si los síntomas persisten, busca atención médica inmediatamente.
6. Entrena tu cuerpo para correr con altas temperaturas: antes de una carrera importante, entrena en condiciones similares para que tu cuerpo se acostumbre al calor. Esto te ayudará a mejorar tu resistencia y a prepararte para enfrentar mejor estas condiciones.
Siguiendo estos consejos, podrás disfrutar de tu carrera con altas temperaturas, manteniendo tu seguridad y comodidad. Recuerda siempre escuchar a tu cuerpo y detente si sientes cualquier molestia. Además, es importante recordar que cada cuerpo es diferente y es importante conocer tus límites y adaptar tus entrenamientos y carreras a tus necesidades individuales. No te compares con otros corredores y sigue tu propio ritmo. Además, es importante tener en cuenta que el calor y la humedad pueden afectar tu rendimiento, por lo que es recomendable reducir la intensidad y la duración de tus entrenamientos en días de calor extremo.
¿Alguna vez el mal tiempo o las altas temperaturas hicieron que no salgas a correr?