<
>

Garibay, el boliviano imparable que quiere hacer historia

Garibay, el boliviano imparable que quiere hacer historia. EFE

Futbolista, mecánico y taxista fueron los oficios que tuvo el boliviano Héctor Garibay antes de alcanzar los podios en maratones de Latinoamérica y Europa y ahora el fondista, cuyo país es el único suramericano sin una medalla olímpica, tiene la mira puesta en los Juegos Olímpicos de París.

Un entrenamiento sin tregua en la región andina de Oruro, su tierra natal, marca la rutina de Garibay, quien en los últimos tres años ha conquistado la medalla dorada en los maratones de Buenos Aires y México, y la plateada en Asunción, Lima y la carrera París-Versalles, entre otras.

Tuvo su primera participación internacional en el Campeonato Sudamericano de Atletismo en Lima en 2019 y desde ahí empezó a destacar en otras competencias. Entre sus principales logros están el segundo lugar en el Campeonato Sudamericano de Maratón celebrado en 2021 en Asunción y el primer lugar en la Maratón de Buenos Aires el mismo año.

Garibay logró la clasificación a París en febrero del año pasado, tras finalizar en el puesto 13 de la Maratón de Sevilla con un tiempo de 2h07:44 que bajó en más de un minuto el récord nacional que él mismo fijó en 2022, en la misma competencia (2h09:08). No fue un logro menor, ya que por los nervios y el cambio de horario no pudo descansar bien y casi se queda dormido, según contó, aunque el desenlace fue feliz.

El 2023 fue su año, primero al clasificar a los Juegos Olímpicos en Sevilla y en agosto ganó la Maratón de la Ciudad de México con un nuevo tiempo récord de 2h08:23, mejorando por más de dos minutos la plusmarca de 2h10:38, impuesta en 2018 por el keniano Titu Ekiru.

Su logro más reciente fue el primer lugar en el Medio Maratón de Río en mayo pasado, pero fue el triunfo en tierras aztecas el que le abrió las puertas a tener más apoyos sobre todo privados, lo que le permite dedicarse al "cien por ciento al atletismo", resaltó.

Está concentrado en su próxima participación de París 2024 y sueña con darle a su país la ansiada medalla olímpica que le hace falta.