Abebe Bikila (7 de agosto de 1932 - 25 de octubre de 1973) es un corredor de origen etíope, dos veces ganador de la maratón olímpica. Consiguió victorias increíbles a lo largo de su carrera, sin embargo su vida fue tan espectacular e inesperada como, para muchos, su final.
Este corredor pertenecía a una familia muy numerosa y pobre de campesinos, por ello es que dentro de su historia se puede comentar que ingresó al ejército cuando apenas tenía 17 años, pensando en la forma de ganarse el sustento diario. Pasó a formar parte del grupo de héroes nacionales al obtener la medalla de oro en la maratón de los Juegos Olímpicos de Roma 1960, prueba que disputó descalzo junto con su hermano Albalonga Bikila, quien falleciera sin que se le reconociera heroísmo, contrariamente a su hermano Abebe.
Cuando comenzaron los Juegos Olímpicos de Tokio 1964, el estado físico de Bikila estaba bastante debilitado. Había sido operado de apendicitis seis semanas antes de disputar la maratón, lo cual afectó su programa de entrenamiento para dicha prueba. No obstante, y aunque esta vez utilizó zapatillas, volvió a obtener la medalla dorada y nuevamente estableciendo una nueva marca mundial.
En el año 1969 el extraordinario Abebe Bikila sufrió, en la ciudad de Sheno, un accidente automovilístico y como consecuencia de los golpes quedó cuadriplégico.
Falleció cuatro años más tarde, el 25 de octubre de 1973, de una hemorragia cerebral producto de una secuela del accidente.
En su país, más de 65.000 personas y el emperador Haile Selassie I despidieron al considerado Héroe Nacional de Etiopía.