El verano ya está a la vuelta de la equina, y las ensaladas de pastas frías son un excelente plato para los corredores durante esta época del año.
Es una comida energética y muy apropiada para recargar glucógeno muscular tanto antes como después de un entrenamiento. Una ración de 57 gramos de pastas simples (no rellenas) como pueden ser los spaguettis, aporta 221 calorías, con 0 gramos de grasa, 43 gramos de carbohidratos y 2 de fibra.
Además, contienen un 14% de proteínas, un 26% del consumo diario recomendado de magnesio y el 51% de zinc, lo que contribuirá a mejorar tus defensas y metabolismo.
Cocinando las pastas en agua, escurriéndolas y dejándolas enfriar, podrás combinarla luego con una infinidad de verduras, legumbres y hortalizas: tomates, lechugas, zanahorias, repollos, remolachas, arvejas, lentejas, cebollas, etc. Mientras más variedad haya mejor será, porque obtendrás una nutrición más equilibrada. Solo es cuestión de usar la imaginación, y tendrás energía para rato.
¿Utilizas pastas frías en ensaladas?