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Son muchos los corredores que intentan correr mayores distancias. Lo cierto es que añadir más kilómetros a tus entrenamientos durante la semana es una buena elección, ya que mejora tu forma física, aumenta la resistencia y quema más calorías. Un buen truco para lograrlo es intentar correr un fondo largo, de mayor distancia de lo que normalmente sueles hacer, cada dos semanas. Este lapso permitirá a tu cuerpo recuperarse y adaptarse correctamente, evitando lesiones. Por ejemplo, si habitualmente corres hasta 10 kilómetros, cada 15 días intenta hacer 12 o 14. En estos casos será necesario que bajes el ritmo de tus corridas, ya que de esta forma tendrás más energía para correr mayores distancias. Recuerda que si aumentas tu kilometraje semanal demasiado rápido, puedes sufrir de una sobrecarga muscular, lo que en última instancia puede traducirse en una lesión. Por lo tanto, en promedio busca aumentar tus fondos en 2 a 3 kilómetros por cada progresión. Por último, una buena táctica para los fondos está en realizar pequeños descansos intermedios previamente programados. Estas pausas serán caminando, y no deberían fraccionar el fondo en más de dos o tres partes. Es decir, si vas a hacer un fondo de 15 kilómetros, podrás programar pequeñas paradas de 30 segundos en los kilómetros 5 y 10, o bien una sola en el kilómetro 7,5. Aprovecha estas pausas para beber líquido, ingerir algún alimento como frutas o geles, y bajar tus pulsaciones. Esto te ayudará a aumentar tu resistencia. ¿Cómo incrementas los kilómetros en tu rutina?
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