No son pocos los que afirman que Grete Waitz es la maratonista más importante de la historia. El motivo: fue, tal vez, la primera que se tomó muy en serio las cosas.
Antes de su aparición como atleta, las pocas mujeres que corrían Maratones lo hacían de forma casi testimonial. Corrían sin que los medios de comunicación ni los organizadores les prestaran casi ninguna atención.
Las proezas de Grete Waitz (cuyas marcas no estaban muy lejos de las de los hombres) hicieron que las grandes organizaciones deportivas, la prensa e incluso la medicina deportiva empezaran a dar su apoyo a las mujeres maratonistas. La normalización definitiva llegó cuando en 1984 la maratón femenina fue incluida definitivamente en el programa de los Juegos Olímpicos.
Grete nació en Oslo, Noruega, el 1° de octubre de 1953, y a lo largo brilló como ninguna otra maratonista en la historia. Comenzó a practicar atletismo desde muy joven, aunque en esa época las mujeres no lo tenían fácil para dedicarse a competir al máximo nivel. Con solo 18 años, participó en los Juegos Olímpicos de Múnich 1972 en la prueba de 1.500 metros. Su irrupción en la élite mundial se produjo en 1974 cuando ganó la medalla de bronce en los 1.500 metros de los Europeos de Roma. En 1975 logró batir en Oslo el récord mundial de los 3.000 metros con 8:46,6. Al año siguiente batió por segunda vez el récord con 8:45,4 en la misma ciudad.
Poco después dio el salto a la distancia reina: los 42k. Así comenzó una carrera plagada de oros: ganó el Maratón de Nueva York nada menos que en nueve oportunidades (1978, 1979, 1980, 1982, 1983, 1984, 1985, 1986 y 1988). Además, ganó dos veces los 42k de Londres, obtuvo el campeonato del mundo en Helsinski en 1982 y la medalla de plata del primer Maratón olímpico femenina: Los Ángeles 1984. También se destacó en cross, ganando 5 cinco campeonatos mundiales, y quebró el récord mundial femenino en maratón en cuatro oportunidades (1978 ,1979 ,1980 y 1983), consiguiendo su mejor marca en la maratón de Londres de 1986, con 2h 24m 54s.
Tras abandonar la alta competencia en 1991, siguió vinculada a este deporte ayudando a su promoción y organizando eventos atléticos. También realiza una gran labor humanitaria, vinculada sobre todo a Care International y a los Special Olympics (donde compiten personas con alguna discapacidad intelectual).
En junio de 2005 hizo público que padecía cáncer, y que se estaba sometiendo a tratamiento desde hacía algunos meses. Finalmente, Grete falleció el 19 de abril de 2011 a los 57 años, luego de luchar contra la enfermedad.
Grete Waitz es una verdadera leyenda en Noruega. En el exterior del Estadio Bislett de Oslo hay una estatua en su honor, y su rostro aparece incluso en algunos sellos. Además cada año se celebra una carrera que lleva su nombre.