Las cebollas son uno de los vegetales más consumidos en la dieta regular. Comúnmente se la encuentra combinada con otros alimentos y formando parte de ensaladas, tartas y otros tipos de comidas,
Lo que muchos no saben es que posee numerosos beneficios para la salud, y hasta puede colaborar de una manera silenciosa en nuestro desempeño como runners. Esto se debe a que la cebolla es una gran fuente de minerales y oligoelementos como el cobre, el potasio, el yodo, el calcio y el magnesio, así como las vitaminas A, B y C.
Además, es excelente para la circulación, ya que cuenta con aliina, la cual es importante para otorgar propiedades antitrombóticas (es decir, que no forma coágulos en la sangre), por lo que ayuda a fluidificar la circulación sanguínea. Además, posee quercetina, que de igual forma previene la trombosis y el envejecimiento de las arterias y las venas, gracias a su contenido en sílice.
Pero esto no es todo: también es capaz de ayudarnos a evitar enfermedades como la arteriosclerosis, el colesterol, la hipertensión, la angina de pecho y otras dolencias relacionadas con una mala circulación. Por último, hay que tener en cuenta que para que su aporte sea al máximo, es mejor comerlas crudas.
¿Sueles incluir cebolla en tu dieta?