Por ser rica en carbohidratos y en agua, una de las frutas más deliciosas, energizantes y refrescantes es sin dudas el mango. Además, es rica en magnesio y vitaminas A y C, y en valores promedio solamente 200 gramos de mango pueden ayudarnos a cubrir la dosis diaria de estos nutrientes.
Cabe recordar que la vitamina C es muy importante para los runners, ya ayuda a nuestro organismo a mejor el hierro de los alimentos, combate enfermedades, protege a nuestro corazón y fortalece nuestro sistema inmunológico, haciéndonos resistentes a las infecciones. Además, contienen betacaroteno, que se transforma en vitamina A en nuestro cuerpo para mejorar el estado del cabello, la piel, los huesos, la visión y las mucosas, también para el correcto funcionamiento del sistema inmune.
El mango también aporta a nuestra dieta una buena cantidad de antioxidantes, ayudándonos a luchar contra los radicales libres. Además contienen potasio y fibra, que mejoran el tránsito intestinal y la inmunidad, al tiempo que reducen los niveles de sodio. Y aunque en cantidades menores también contiene hierro, calcio, yodo, zinc, vitaminas B1, B2, B3, B5, B6, B9, E, K, y fósforo. Con todo esto, el mango es uno de los alimentos naturales con propiedades anticancerígenas, gracias a estas vitaminas y a los flavonoides como la quercitina.
Se lo puede consumir sólo, fresco, o bien acompañando ensaladas de fruta o postres. Últimamente el mango también ganó una notable consideración en los platos de la cocina gourmet, por lo que se lo suele ver inclusive en preparaciones saladas, dando un toque agridulce debido a su intenso sabor. Y si eres de los que antes o después de entrenar prefieren los batidos, el mango va muy bien combinado con otras frutas como las bananas, frutillas o naranjas.
¿Incorporas el mango en tu dieta?