<
>

Historias de vida: Arthur Lydiard

ESPN Run

Arthur Lydiard es otro de los nombres que escribieron las páginas de la historia del running. Nació en 1917 en Auckland, Nueva Zelanda. A sus 13 años empezó a correr en la modalidad cross country. Más tarde, cuando trabajaba en una fábrica empezó a competir. También jugó al rugby durante 13 años.

Después de la Segunda Guerra Mundial, cuando dejó el rugby, empezó a correr para mantenerse en forma. Entrenaba en base a grandes volúmenes semanales, y ganó varios campeonatos de maratón en Nueva Zelanda, principalmente, dijo, porque nadie más se había entrenado lo suficiente. Su maratón más rápido fue de 2 horas, 39 minutos, 5 segundos.

Arthur fue coautor, con Garth Gilmour, de varios libros sobre el deporte de correr, entre ellos, "Jogging with Lydiard y Running the Lydiard Way", pero se lo reconoce mundialmente por ser considerado el primer entrenador de corredores de fondo y uno de los primeros en promover el running para mejorar la forma física. El mensaje de Lydiard era que el éxito en las carreras de larga y media distancia residía en adquirir resistencia por medio de duros entrenamientos de gran kilometraje. También insistía en que no había excusa para no estar bien entrenados.

Además, Arthur practicó lo que predicaba. A los 60 años, a base de carreras suaves y largas, hacía más de 170 kilómetros a la semana. Sus corredores neozelandeses más conocidos fueron Peter Snell, Murray Halberg, Bill Baillie y John Davies. Entrenó a Snell para el récord mundial de la milla y la media milla. De 1965 a 1972 también entrenó a los equipos olímpicos o nacionales, o ambos, para México, Finlandia, Venezuela y Dinamarca.

Durante años no fue profeta en su tierra, Nueva Zelanda. En los Juegos Olímpicos de Roma de 1960, donde, en el plazo de media hora, Snell ganó los 800 metros y Halberg los 5.000, no le dieron credenciales, ni siquiera una entrada gratis. De hecho, sus atletas tenían que salir de la Villa Olímpica para hablar con él. En 1964, cuando siete de los nueve corredores olímpicos neozelandeses eran alumnos suyos, le entregaron por fin credenciales olímpicas. Después de esas olimpiadas, dejó de entrenar a deportistas para entrenar a entrenadores.

Athur Lydiard murió el 11 de diciembre de 2004, a sus 87 años de edad. Dedicó toda su vida al deporte que tanto amó, hasta el último minuto, y al momento de su fallecimiento se encontraba en Texas, EE UU, dando conferencias sobre entrenamiento para corredores.